ELCHE. Este jueves el PSPV, Podem y Compromís presentaban sus enmiendas a la Ley de Protección del Palmeral de Elche. Los grupos que conforman el Botànic han presentado su batería de propuestas tras las reuniones mantenidas hace unas semanas con las entidades y colectivos que habían alegado al proyecto de ley, con posiciones enfrentadas en aspectos sensibles como el uso y la edificabilidad. Sin duda, de las iniciativas que han presentado y que se aprobarán en la futura ley, otra de las de más peso y de las más reivindicadas era la de la financiación. El Consell sufragará la mitad de los gastos de mantenimiento y conservación.
A este respecto, la socialista Trini Castelló asevera que la conselleria de Hacienda se ha comprometido a cargar con la mitad de los gastos de mantenimiento del Palmeral a partir del presupuesto del próximo año, algo que la propia diputada en Les Corts señala como "la más importante reivindicación del Ayuntamiento, colectivos y financiación". Una apuesta que busca asegurar los fondos gobierne quien gobierne tanto en el Ayuntamiento ilicitano como en la Generalitat Valenciana. "Hasta ahora recaía el peso sobre el Consistorio, de hasta un millón de euros anualmente. Creo que es la mejor noticia que puede tener el pueblo de Elche y todos para que podamos garantizar la conservación, desarrollo, producción y su valor paisajístico, cultural e identitario del palmeral".
Algo que supondría un importante espaldarazo, a la vista de lo desbordada que anda la administración local para gestionar un bien natural que está disperso por todo el término municipal. Además del estado y la infrautilización de sus potencialidades, cuenta con una plantilla de palmereros muy reducida, que provoca que no se hayan adecuado huertos durante años, por lo que año a año está externalizando parte del servicio para la poda de huertos históricos. Con el compromiso del Consell habrá que ver cómo afecta al futuro de la gestión y el estado del palmeral con esta consignación. Y si es suficiente.
Por otra parte, sobre el poco aprovechamiento respecto a lo que el palmeral puede ofrecer, los tres grupos del Botànic, que han presentados las enmiendas conjuntamente atendiendo las propuestas de los distintos colectivos, según indican, también han propuesto que la Séquia de Marxena sea también declarada Bien de Interés Cultural (BIC) junto a la Acequia Mayor del Pantano. Una cuestión que surgió en la última jornada de ponencias por el abandono del sistema de irrigación.
Asimismo, sobre la participación, se amplían los vocales que forman parte del Patronato del Palmeral, de cinco a siete miembros, "para garantizar la pertenencia de los datileros y entidades ecologistas, aunque venían reflejándose dentro de asociaciones cívicas que tienen que estar representadas en los órganos del Patronato", apunta Castelló. También se ha incorporado que dicho órgano debe reunirse al menos una vez al año. De lo contrario, podrá ser una considerada una infracción grave si la presidencia y vicepresidencia no convocan. Una medida impulsada tras haber pasado años sin reunirse.
Por otra parte, y respecto a las palmeras, también se ha incorporado que figure en el proyecto de Ley la diversidad genética de las palmeras, así como destacar "la salvaguarda de la cultura del dátil", una afirmación genérica que se tendrá que ver cómo materializar. Asimismo, se incorporará en el registro, presente en la sección 1 de la futura normativa, que se incorporen aquellos ejemplares de palmera datilera con valor por su calidad en los dátiles. Son algunos de los aspectos relevantes que se van a priori se aprobarán. No obstante, aún se estaban cerrando enmiendas este jueves. El plazo previsto para la aprobación de la ley es de mes y medio. Tras la misma habrá que acabar de empujar la normativa local para adecuar los usos una vez aprobada esta norma de rango superior. Y hay un plazo para que el trabajo realizado hasta ahora no caduque.