ORIHUELA. La Generalitat está trabajando en un proyecto para evitar que el escenario de tal gravedad de inundación del pasado septiembre vuelva a repetirse. Y Holanda es uno de los ejemplos donde se van a fijar en aspectos de materia hidríca para aplicar algunos sistemas allí planteados. La Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica junto a la Dirección del Agua han elaborado un estudio que adelantó Alicante Plaza sobre el riesgo de la Vega Baja frente a inundaciones y donde recoge la necesidad de realizar un plan de infraestructuras hidráulicas y propuestas de soluciones de gran calibre.
Entre las propuestas, las más destacadas son la creación de zonas inundables donde desembocar el agua, unos sistemas de bombeo potentes para elevarlas y llevarla a unos corredores verdes, lo que han empezado a llamarle el futuro río de la Vega Baja, que llegaría hasta el mar, y por último, como gran cambio, lo que se conoce como pueblos pólder, es decir, pueblos 'isla'.
Para dotarse de mayor nivel de conocimiento y aprender algunos detalles del país por excelencia que desde hace siglos vive con sistemas mediante los cuales hace un uso controlado de los niveles del mar y de drenaje, en las próximas semanas, un equipo formado por técnicos e ingenieros de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural y la Dirección del Agua, viajará a Holanda. "Este país tiene experiencia de más de 500 años" comenta Manuel Aldeguer, Director General del Agua de la Generalitat. De hecho, el concepto de pueblos pólder significa unas zonas que están por debajo del nivel del mar en Holanda y los agricultores utilizan sistemas de bombeo para mantenerlo drenado y unas canalizaciones para evitar la inundación.
En esas reuniones de trabajo se prestará especial atención a la energía que se necesita, cómo la emplean, los sistemas de bombeo y las áreas de inundación.
Aldeguer asume el reto que tiene por delante ante la magnitud del proyecto pero es consciente de lo necesarias que son las infraestructuras y la premura con la que hay que llevarlas a cabo. "Es un camino muy largo, pero a final de año me gustaría que hayamos andado mucho" comenta. Asegura que algunas obras podrán estar encargadas a final de año, como la de los pueblos 'isla' y las zonas de inundación local. En este sentido cita los municipios de Callosa de Segura, Redován, Cox o San Felipe, que dada so orografía sufren inundaciones locales debido a la cercanía con elevaciones montañosas. Y para estas acciones sugiere que se hagan ya. Pone como ejemplo Redován. "Antes el pueblo estaba más cerca de la ladera, ahora las nuevas construcciones se han ido alejando, por eso cuando llueve toda el agua que además viene de la sierra va a parar a esa zona". Ante esta situación propone que se recogería ese agua para llevarla a una zona de inundación, una especie de balsa, y de ahí, mediante bombeo llevarla hasta los corredores verdes para que se evacue.
Otro de los aspectos en los que se está trabajando es en la tramitación de los pliegos para la redacción de estudios donde se valoren los costes, los impactos ambientales, la forma de ejecutar las propuestas y con el objetivo de tener sobre la mesa todas las alternativas para decidir cual es la mejor opción.
En materia también de propuestas, esta semana el portavoz de Recursos Hídricos del PSPV-PSOE en Les Corts, Manuel Pineda, presentaba una Proposición No de Ley (PNL) para instar a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) y al Gobierno central a llevar a cabo actuaciones como el dragado en la desembocadura y antiguo cauce del río Segura "para que el desagüe sea efectivo y rápido", y elevar la N-332 para "evitar el efecto barrera en posibles futuras inundaciones".
La semana pasada, Manuel Aldeguer, mantuvo en Guardamar del Segura una reunión con regantes, agricultores y jueces de agua de la Vega Baja para trasladarles el estudio y conocer su opinión. En líneas generales los comentarios que éstos transmitieron fueron de carácter favorable. Hoy sigue la ronda de encuentros, y en esta ocasión en Rojales, con grupos ecologistas y la Universidad de Alicante y la Universidad Miguel Hernández. El documento es el mismo, pero el enfoque es distinto, se centrarán en el aspecto medioambiental y en los impactos que pueda tener sobre la naturaleza. También ha avanzado que en marzo se reunirá con alcaldes para centrarse principalmente en la propuesta de los pueblos 'isla'.