EL CAMPELLO. El Ayuntamiento de El Campello ha dado luz verde a dos puntos relacionados con la piscina municipal. El primero, la estructura de costes y revisión de precios del contrato para la explotación y mantenimiento, aprobado con los votos a favor del equipo de Gobierno (PP, Cs y Vox); los votos en contra de EUPV y Podem, y las abstenciones de PSOE, Compromís y Red. El segundo, la modificación del proyecto de explotación, aprobado por los votos a favor de PP y Vox, sin su socio de gobierno, Cs, que ha votado abstención junto con PSOE, Compromís y Red, y los votos en contra de EUPV y Podem.
Esta es la tercera vez que se aprueba el proyecto de explotación, siendo originalmente de 2017, modificado en 2020 y ahora, en 2022, introduciendo la fórmula de revisión de precios. Una actualización que el portavoz de Cs, Julio Oca, ha tildado de "gymkhana administrativa, porque no paramos de sortear obstáculos para intentar llegar al meta, que es la apertura del complejo deportivo", señalando, además, el "hándicap" que supone que la documentación se facilite "a última hora, con prisas y casi sin posibilidad de estudiarla con detenimiento". Y ha reivindicado que la apertura de la piscina "no se puede demorar más".
En cuanto a la corrección de costes, el concejal de Deportes, Cristian Palomares (PP), ha manifestado la importancia de esta fórmula "para que la empresa adjudicataria siga teniendo viabilidad económica y tener una instalación abierta para el uso y disfrute de nuestros vecinos". Además, la portavoz de Vox, María José Sañudo, ha informado de que blinda la posibilidad de revisar las tarifas del licitador tras dos años "con dos condiciones: debe haberse ejecutado al menos el 20 % del contrato y durante el periodo de recuperación de la inversión". El documento lo ha elaborado la UA y cuenta con el informe favorable de los técnicos municipales.
El discurso de la oposición ha ido encaminado hacia la posibilidad de buscar otros modelos de gestión. Así, el portavoz de Compromís, Benjamí Soler, ha sugerido la licitación "por lotes para agilizar este procedimiento, señalando también que en este proceso se han perdido "tiempo -porque no eran necesarios dos años para esta aprobación- y dinero -porque esta propuesta bien podría haber salido de los técnicos de la casa-".
Otro modelo de gestión que se ha puesto sobre la mesa ha sido el mixto, propuesto por el portavoz de RED, Eduardo Seva, quien ha manifestado que "las pistas de deporte, que requieren poco mantenimiento, podrían ir a cargo del personal del Ayuntamiento, mientras que el resto, que es más complicado, podría dejarse a una empresa". Y ha emplazado a abrir la consulta al Consejo Social para oír el resto de voces.
Pero la opinión mayoritaria ha sido la municipalización del servicio, donde el portavoz del PSOE, Vicent Vaello, ha declarado que, "si tanto beneficio se va a obtener, justificaría perfectamente que la explotación de la piscina fuera de gestión pública, pero el PP, como siempre, prefiere lo privado antes que lo público". Un modelo que el alcalde, Juanjo Berenguer, ha descartado, recordando la "insuficiencia de medios" que subrayan los informes.
También ha hecho hincapié en la gestión municipal el portavoz de EUPV, Pedro Mario Pardo, asegurando que "es más beneficiosa que la privada al ahorrarnos el pago del IVA, el IBI, la tasa de basura o el alcantarillado, entre otras. Nuestros vecinos y vecinas continúan pagando esta piscina cerrada por su cabezonería, sin poder bañarse".
Y ha sido el portavoz de Podem, Eric Quiles, quien ha negado su voto a favor por ser un "proyecto low cost, en el que todo cabe, sin limitaciones y exigencias, sin calidad ni recursos. Va a bajar la calidad del servicio, pero las cuotas de las personas que van a disfrutar del complejo, van a subir, según el proyecto".