ELCHE. 870 votos frente a 420 (además de uno blanco y dos nulos y a falta del recuento provincial). Así de clara y contundente ha sido la victoria de Pablo Ruz frente a la exalcaldesa Mercedes Alonso; un pulso que ha tensado la organización en los últimos tiempos y que hace al joven aspirante presidente del Partido Popular de Elche. Una victoria que hace a Ruz presumiblemente alcaldable del partido de cara a las elecciones locales de 2019. Aunque se ha mostrado con reservas en las últimas semanas respecto a esta cuestión porque lo que se elegía el miércoles era al presidente del partido, él mismo ya ha señalado en más de una ocasión que ser alcalde sería un sueño hecho realidad. Además, una decisión que desde los órganos superiores del partido, donde tienen que refrendarle, verían con buenos ojos.
Empezaba animada la mañana, con la noticia de que Enriqueta Seller retiraba su candidatura, una maniobra como mínimo sorprendente y de la que no ha dado motivos. Curioso con el discurso en el que apelaba a la unidad de las tres listas. Como anécdota, publicaba en redes sociales que se unía a la lista de Ruz, algo que borró al poco y que no tardó en desmentir la lista del ahora presidente electo. Anécdotas aparte, estaba claro que las votaciones iban a ser cosa de dos: por una parte la lista de Alonso con la estructura y lo cosechado durante su legislatura como alcaldesa, y por la otra, Ruz, que ya era vox populi desde hace algún tiempo que empezaba su carrera como alcaldable y que contaba con apoyos de nombres importantes dentro del partido.
Junto a él estaban la mayoría de concejales (salvo Vicente Granero, Justino Delgado y Erica Sánchez), exediles díscolos de la anterior legislatura como Polo o McEvoy, o el presidente de Nuevas Generaciones Sergio Rodríguez. Tenía consigo, y como él mismo fue, a gente que en su día estaba muy vinculado o era mano derecha de la propia Alonso. Pero es lo que hay en el juego de tronos, y la conveniencia; cada uno ha jugado sus cartas y ahora que han ganado los de Ruz, está por ver en el futuro cómo se distribuyen asuntos no menores como portavocías o dedicaciones exclusivas. En cualquier caso, se abre una nueva etapa para el partido, y como el propio Ruz indicó tras la victoria: hay que hacer un partido unido, algo en lo que ya hizo énfasis durante su periodo de campaña en estas primarias, preparar el combate de cara a 2019. Un candidato, además, que es una mala noticia para el PSOE y el actual tripartito, pues Ruz tiene carisma y sabe moverse muy bien, despierta la simpatía y la esperanza de muchos y con toda seguridad recuperará parte del voto perdido que ha ido a formaciones como Ilicitanos por Elche o Ciudadanos.
Después del protocolo y dar las gracias a contrincantes, afiliación y a todo el mundo que pasara por allí, ante más de 50 personas con sus respectivos vítores, Ruz lo repitió varias veces, “este partido sólo tiene un futuro y es la unidad, imprescindible para que podamos escribir un futuro mejor para esta ciudad”. Incidió en que se había dado un ejemplo “absoluto” por las buenas formas, en referencia a la esperpéntica asamblea de 2012 de la que salió elegida Alonso. “Mañana empieza el trabajo para hacer de este un partido absolutamente unido con todos”, y aseveró que no se trataba de “papel mojado”. Unas emocionadas y agradecidas palabras que contrastaban con las escuetas palabras de Alonso, que se limitaba a felicitar a Ruz, apelando a la unión —porque es lo que tocaba decir después de las palabras del vencedor—, indicando que está a su disposición y que el enemigo “está enfrente”. Respecto a esa unión, Pablo Ruz no especificó cómo se materializará esa unión, pero sin duda será uno de los puntos candentes a tratar tras estas primarias.
Por su parte, en Dolores se presentaron Manuel Ramón Simón y Víctor Manuel Gómiz, mientras que el comité de dirección provincial ratificó las candidaturas de Vicente Serna y Ana Iluminada Serna para Albatera. En el primer municipio se impuso la candidatura de Simón por 74 votos frente a 30; mientras que en el segundo la victoria fue para Ana Iluminada Serna, por 179 votos a 34.