ALICANTE. El nuevo statu quo patronal en la provincia de Alicante, con la desaparición de Coepa tras una liquidación exprés y los trabajos a marchas forzadas para poner en marcha una nueva patronal que la sustituya, Uepal, podría favorcer, al fin, el entendimiento entre el empresariado alicantino y el presidente de la nueva patronal autonómica CEV, Salvador Navarro. Al menos así lo esperan desde uno y otro lado, tras un año de tiras y aflojas (desde que la antigua patronal provincial de Valencia dio el paso para ocupar el espacio de la extinta Cierval) que no llegaron a ninguna parte.
Según han confirmado fuentes próximas a las dos patronales, en las últimas horas se ha producido un cierto deshielo, y ya se han mantenido contactos informales para preparar una nueva reunión en la que negociar la posible integración de Uepal en la organización autonómica. De momento, no obstante, no hay concreciones al respecto, aunque en uno y otro 'bando' empiezan a llegar mensajes conciliadores. Así, en Alicante esperan que, una vez aprobados sus estatutos la próxima semana, se pueda producir un nuevo encuentro formal con la CEV, que hará lo propio con su nueva estructura autonómica (incluido el consejo empresarial de Alicante, su representación en la provincia), para abordar la cuestión.
En realidad, la integración de la patronal alicantina, fuese Coepa en su momento, Cepal (el intento de fusionar a la anterior con Cepyme, que decayó al liquidarse la primera) más tarde, o la actual Uepal (construida desde cero por asociaciones empresariales de la provincia), ha sido siempre la aspiración última de los empresarios alicantinos. Las fricciones han llegado al abordar la fórmula para esa integración: en Alicante siempre se ha considerado irrenunciable contar con personalidad jurídica propia y capacidad de actuar de forma independiente (es decir, de representar por sí misma al empresariado alicantino), mientras que desde València se insiste en que, en cualquier caso, la patronal provincial entraría a formar parte como un asociado más en pie de igualdad con el resto de sectoriales, federaciones y empresas asociadas. En función de lo que pague, evidentemente.
Con el expresidente de Coepa Francisco Gómez (que formará parte de Uepal como presidente de la Asociación de la Empresa Familiar, que es una de sus impulsoras) en un segundo plano, la dirección provisional está de acuerdo en darse una última oportunidad de entendimiento con la CEV, según las fuentes consultadas. Gómez, que en los últimos tiempos de Coepa mantuvo varios encuentros con Navarro para intentar un acuerdo, podría tomar parte en la negociación, aunque serían el presidente provisional de Uepal, Miguel Baena, y el vicepresidente, Luis López, quienes la dirigirían por la parte alicantina. En lo que unos y otros parecen estar de acuerdo es que, sea cual sea el resultado de esta nueva negociación, será la última vez que se intente.
Como ha publicado Alicante Plaza, son una treintena de asociaciones empresariales las que impulsan el nacimiento de Uepal. Tras firmar el acta fundacional y designar a la dirección provisional el pasado 29 de enero, estas asociaciones se reunirán el próximo miércoles para aprobar los estatutos de la nueva patronal. Basados en los que se elaboraron para la fallida Cepal, la patronal tendrá ámbito autonómico y, de momento, no aceptará la asociación directa de empresas.
Entre los socios fundadores figuran, además de asociaciones de corte muy local, algunas nacionales, como la Asociación Española de Componentes del Calzado (AEC) o la Federación de Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas (Fepex). También alguna autonómica, como la zapatera Avecal (que a su vez ya es socia de CEV) o la Asociación de Empresarios de Vehículos de Alquiler (Aecoval), que agrupa al 90% de su sector.
Mientras, la patronal autonómica ha pedido a la CEOE que le asigne una sede en Alicante para su consejo provincial (que se formará en la asamblea estatutaria), de entre los inmuebles que la patronal nacional tiene cedidos por el Ministerio de Trabajo, titular del patrimonio sindical. Ese es el caso del local que venía usando Coepa en la calle Orense, desde que en 2014 vendió su antigua sede en Ruperto Chapí a un inversor ruso (hoy alquilada por la Cámara de Comercio) y hasta su desaparición. Todo parece indicar que la CEOE asignará el uso de ese inmueble a la nueva patronal autonómica, para que se convierta en su sede en la provincia. No obstante, aún no se ha producido una decisión al respecto, según las fuentes consultadas por este diario.
Llegado el momento, el uso del local podría ser un nuevo foco de conflicto entre Cepyme (actual usuaria) y la CEV, a la que la organización que preside Cristóbal Navarro intentó dejar sin ayudas del Consell y al margen de las elecciones en la Cámara de Comercio. En este caso, al ser el inmueble propiedad del Estado, no existen derechos adquiridos por los años de uso. Eso sí, desde la CEV aseguran que no obligarán a ninguno de los actuales usuarios del local (media docena de asociaciones que eran miembros de Coepa) a abandonarlo, incluso si la CEOE lo convierte en su sede.