ALICANTE. El presidente de la Confederación de Empresarios Valencianos (CEV) Salvador Navarro sigue dando pasos para terminar de armar su modelo de patronal autonómica, tras la modificación del artículo 4 de los estatutos el pasado mes de marzo para posibilitar la asociación de organizaciones y empresas de las otras dos provincias de la Comunitat. Mientras sigue negociando con la patronal alicantina, Coepa, la fórmula que permita encajarla en ese modelo, Navarro tiene previsto mantener este mismo mes una reunión con los responsables del Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca) para abordar la futura colaboración entre ambas entidades.
Como ya publicó Alicante Plaza, el presidente de CEV quiere que Ineca se convierta en el think tank de cabecera de la patronal valenciana. Una propuesta que busca, de un lado, reforzar el cariz vertebrador que pretende dar a su proyecto (Ineca fue impulsada en su día por el expresidente de Coepa Joaquín Rocamora, y muchos de sus asociados lo son a la vez de la patronal), situando su laboratorio de ideas con base de operaciones en Alicante. Y de otro, aprovechar el potencial de la única organización que existe con dichas características, puesto que Ineca es en realidad (tal como destacó el propio Navarro en el acto público donde lanzó la idea) la única organización de carácter empresarial dedicada a la elaboración de informes y análisis de datos con los que sustentar las reivindicaciones de los empresarios de la Comunitat.
Ineca ha ganado peso en los últimos meses bajo la presidencia del empresario Perfecto Palacio como una de las voces que reivindica el déficit inversor en la provincia de Alicante, basándose en el análisis de los datos que se publican en las estadísticas oficiales, o con el impulso a la futura zona franca en el puerto, que en los últimos meses sin embargo ha quedado aparcada (de nuevo) fruto de las diferencias políticas. Como ejemplo de uno de sus últimos hitos, Ineca ha vuelto a meter en el debate sobre el Corredor Mediterráneo la necesidad de que Fomento conecte de una vez por todas el aeropuerto de Alicante-Elche (que este año recibirá 13 millones de pasajeros) a la red ferroviaria.
Según han explicado fuentes próximas, la idea es que Salvador Navarro curse una visita a la sede de Ineca, como ya hiciera con Coepa, para trasladar a los empresarios alicantinos con mayor detalle su propuesta para que el instituto sea el laboratorio de ideas de la nueva patronal autonómica. Una colaboración que en realidad no precisa de excesivos ajustes orgánicos, a juicio de las fuentes consultadas, pero que en cualquier caso podría reflejarse en los nuevos estatutos en cuya elaboración se está trabajando ya desde la CEV. En principio, la voluntad del líder patronal valenciano es que esos estatutos puedan aprobarse tras la convocatoria de elecciones en otoño. En Ineca ven con buenos ojos la propuesta, que tildan de "interesante", a la espera de que Navarro la plantee al detalle.
Mientras, como ya ha contado este diario, la patronal valenciana ha encargado a su servicios jurídicos que evalúen la propuesta concreta que les ha hecho llegar el presidente de Coepa, Francisco Gómez, para integrarse: pagar por 100 vocalías (lo que supone trasladar directamente los ingresos por cuotas de Coepa a la CEV) y ejercer la representación delegada de las asociaciones y federaciones empresariales de la provincia, a cambio de que la nueva patronal valenciana cargue con los gastos de funcionamiento de la alicantina, por un lado, y con el cumplimiento del convenio de acreedores, por otro. La propuesta no termina de convencer en Valencia, porque además se teme que en el futuro puedan aflorar nuevas 'cargas'.
Según las fuentes consultadas por este diario, CEV no tendría problema en asumir los gastos ordinarios de funcionamiento de Coepa, que además se han reducido al mínimo tras dos EREs y un concurso de acreedores. No obstante, la propuesta de asumir también el cumplimiento del plan de viabilidad (hay pactado un calendario a ocho años con el Fogasa y los exempleados) o eventuales expedientes de reintegro por parte del Servef, como los que ya hay en marcha, parecen complicar el acuerdo. Todo hace prever que el informe jurídico desaconsejará esta solución, como ya sucediera cuando se debatía la fusión CEV-Cierval, para no poner en riesgo la propia viabilidad de la patronal valenciana.