ELCHE. La Generalitat quiere finalizar el desdoblamiento de la carretera CV-865, más conocida por ser la que une Elche y Santa Pola, en este mandato. Ese fue el reto que planteó en la jornada del miércoles, el conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, tras su visita a las obras de desdoblamiento, del que ahora han acabado las obras del segundo tramo, con un desembolso de casi 1,5 millones de euros. La siguiente fase será la licitación del tramo Vereda de Sendres-Valverde antes de finalizar el año, lo que supone la primera actuación del desdoble en el término municipal de Elche. Hasta ahora se han invertido 3,3 millones del total de unos 10 que se prevé invertir para el desdoblamiento de los 11 kilómetros de carretera. Unas obras ejecutadas por CHM y Pavasal.
En el primer tramo las actuaciones que se han ejecutado han sido la adecuación de carreteras y medianas, se han instalado rotondas que obliguen a reducir la velocidad y la accidentalidad de la carreteras, así como la ampliación de los carriles bici en un metro. Unas actuaciones de 1,8 millones en 12 meses en los que los técnicos de la Conselleria indican que al menos se ha reducido la velocidad en 23 km/h. Puede que más incluso con las rotondas.
En lo que respecta al tramo de la Vereda de Sendres a Santa Pola, el ya finalizado que visitaron el miércoles, de 1,5 millones, además del desdoble se han instalado varias paradas de autobús donde se ha podido. Asimismo, los carriles bici se han financiado con los fondos europeos Feder al ser carriles bici especiales porque rodean el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola.
Respecto al tercer tramo de la carretera, de 1,5 kilómetros y el primero en el término ilicitano, seguirá incluyendo medidas de choque para la accidentalidad con desdobles y está a punto de su licitación. Irá desde la Vereda de Sendres hasta el cruce de Valverde y tendrá un coste de 2 millones de euros. Por su parte, los técnicos de la conselleria dirigida ahora por Arcadi España destacan que este tercer proyecto está para supervisar, y el cuarto lo estará pronto. Este último ya está redactado y tendrá un coste de 2,4 millones de euros, en un tramo de 1,6 km y un plazo de ejecución de 14 meses. Asimismo, también señalan que el último tramo de la carretera puede ser el más delicado dado que está afectado por el Patricova por el riesgo de inundación. Se verá en las siguientes fases.
Para el conseller, estas obras van más allá de la seguridad, indica que aborda los retos de movilidad del futuro dado que "también incluye carriles bici y paradas de autobuses". Según especifica España, el desdoblamiento de la carretera de Santa Pola a Elche es "una reivindicación histórica de ambos municipios, por ser una de las carreteras comarcales más peligrosas de la provincia, por la que pasan una media de 17.000 vehículos diarios".
Por otra parte, el conseller de Obras Públicas no ha especificado por el momento ninguna otra actuación durante este mandato en su primera visita oficial a la ciudad. Tampoco ha especificado si hay novedad sobre el 'pack' de reivindicaciones ferroviarias de la ciudad. Entre ellas, la de la conexión del Aeropuerto Alicante - Elche con la ciudad ilicitana, ya que hace unos días el propio España visitó la capital alicantina para anunciar novedades sobre la conexión de Cercanías del aeropuerto con la misma. España no detalla si hay proyecto redactado o avanzado, aunque explicó que en una visita al Ministerio de Fomento, desde este se les trasladó "que se quiere priorizar", aunque de cara a los presupuestos del año que viene.
