ALICANTE (EFE). La Agència Valenciana de la Innovació (AVI) desarrollará nuevas mascarillas y pantallas faciales dotadas con propiedades antimicrobianas y aditivos naturales que serán capaces de prevenir contagios por virus, según ha informado este martes la Generalitat, que financiará la investigación.
La iniciativa, bautizada como DotMask, está coordinada por la empresa química Lamberti, además de contar con la participación del Instituto Tecnológico del Plástico, Aimplas; el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital La Fe de València, la biotecnológica ADM Biópolis y la firma fabricante de mascarillas Airnatech.
La Generalitat ha señalado que el desarrollo de materiales con capacidad antibacteriana y viricida responde a la necesidad de reducir la incidencia de contagios provocados por patógenos como el de la covid, que, con frecuencia, se transmiten principalmente por vía aérea.
Ha sostenido que, hasta ahora, los recubrimientos diseñados como medida pasiva de protección empleaban aditivos inorgánicos basados en metales, pero que esta composición presenta algunos inconvenientes, como su propensión a la corrosión en determinados ambientes, o la posible liberación de iones activos, lo que ha abierto un debate sobre su potencial toxicidad.
Las sustancias extraídas de plantas mantienen, en cambio, estas mismas propiedades bactericidas y viricidas, con la ventaja de que, al tratarse de compuestos de origen natural, presentan un menor riesgo de efectos secundarios, alergias o toxicidad, tanto para la persona usuaria como para el medio ambiente.
Así, el proyecto DotMask está desarrollando materiales basados en compuestos fenólicos de origen natural, cuya actividad antimicrobiana se ha comprobado muy elevada, con el objetivo de integrarlos en equipos de protección individual (EPI) y lograr una protección altamente eficaz frente a los patógenos, que consiga una disminución significativa de la transmisión de enfermedades.
Los nuevos recubrimientos antimicrobianos, desarrollados a partir de extractos botánicos, se aplicarán tanto a textiles para la confección de mascarillas como a láminas de plástico con las que se fabricarán pantallas de protección facial, dos sistemas de prevención que reforzarán la seguridad de los servicios sanitarios y ampliarán las opciones de protección en situaciones de pandemia.
El vicepresidente ejecutivo de la AVI, Andrés García Reche, ha destacado la importancia de la cooperación entre los agentes del sistema de innovación como vía para hacer frente a desafíos de gran calado como, por ejemplo, la protección contra virus y bacterias: "Si algo nos ha demostrado esta pandemia es la necesidad de innovar y consolidar un sector sanitario sólido y creativo".
"Contamos con un gran potencial científico y tecnológico focalizado en la salud, que hemos de ser capaces de transferir a nuestro tejido productivo. Proyectos estratégicos como el presente constituyen una oportunidad única para avanzar en esta dirección", ha asegurado García Reche.
El proyecto se alinea con la Estrategia de Especialización Inteligente de la Comunitat Valenciana, conocida como S3, que coordina la Conselleria de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, y que recoge como uno de los objetivos prioritarios la "promoción de la salud y sanidad eficiente"