ALICANTE. El Informe de Coyuntura Socioeconómica de la Provincia de Alicante de Ineca relativo al cierre del año 2017 pone de manifiesto que la recuperación económica en la provincia es demasiado lenta para crecer y ser competitivos frente a otros territorios. El presidente del Instituto, Rafael Ballester, ha explicado que, en el análisis de las diferentes variables se aprecia que la provincia está perdiendo peso en el conjunto de España, por lo que los esfuerzos que se están realizando hasta ahora puede que no vayan en la dirección correcta. “Es necesaria una mayor intensidad en los mismos y es posible que estemos en un momento delicado, por lo que las decisiones, empresariales, políticas o sociales que se tomen pueden encauzar en la dirección oportuna, o por lo el contrario, lastrar los avances realizados en la provincia”.
A modo de resumen y en lo que respecta al bloque de Empresa y Trabajadores, el tejido productivo de Alicante sigue mostrando un elevado grado de actividad con 4.738 nuevas sociedades mercantiles, y a pesar de que disminuya el crecimiento respecto a 2016, lo hace mucho menos que el conjunto nacional. En este sentido, el director de Estudios, Francisco Llopis, ha explicado que “la provincia pierde dinamismo pero se trata de un pequeño descenso porque seguimos siendo emprendedores. El lado malo es la alta disolución que existe. En Ineca se estudiará a qué se debe esta situación pues el INE no específica más detalle”.
El 2017 finaliza con 591.211 trabajadores. Este dato es superior al valor de final del 2008 que fue de 565.868 cotizantes. Al respecto, el presidente de Ineca ha incidido en que “la capacidad productiva se ha recuperado y sigue en aumento, pero no podemos olvidar que esta mano de obra ahora recibe unos salarios inferiores a los de hace una década dando lugar a unos ingresos por cotizaciones igualmente inferiores”.
Rafal Ballester ha señalado que en Iineca se analizará con detalle "aquellas provincias con las que en una u otra forma competimos, ya sea por turismo, industria o servicios; así como por los fondos públicos", para comprobar si realmente se remonta y se adquiere una velocidad de crucero adecuada que permita consolidar los logros socioeconómicos conseguidos. “Tenemos que estar vigilantes para mantener la posición de Alicante dentro del panorama nacional, que no es otra que la de ser la primera provincia no capital de comunidad autónoma por nivel de riqueza, ya que solo nos supera Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla. Pero sin olvidar que por detrás nos pisan los talones provincias como Málaga, Murcia, Zaragoza o Bilbao”.
En lo que respecta al Comercio Exterior, Llopis ha explicado que "sigue siendo nuestro talón de Aquiles y probablemente un fiel reflejo de la economía de la provincia. Mejoramos las estadísticas pero no lo suficiente". Las exportaciones de Alicante en el 2017 siguen la senda creciente del año anterior, con un incremento anual del 2,4%, frente al aumento medio nacional que se eleva hasta el 8,1%. Alicante lleva ya muchos años perdiendo peso en las exportaciones y ahora tan solo representa el 1,8% del total nacional. En el bloque de Turismo, los establecimientos hoteleros de la provincia de Alicante están sufriendo una reducción importante en las pernoctaciones de residentes nacionales que en parte se está compensando por el incremento de las pernoctaciones de extranjeros. Juntando ambos mercados las pernoctaciones en Alicante mantienen una senda positiva, pero con menor intensidad que la del conjunto nacional, que de forma suave va perdiendo peso.
Durante su intervención, el presidente de Ineca ha manifestado que “no se entiende cómo la provincia presenta un volumen de producción tan elevado y en cambio mantiene un nivel de salario medio y de renta per cápita tan bajo en comparación con el resto de provincias. Si continúa la tendencia de bajos salarios las consecuencias pueden verse comprometidas, pues no seremos capaces, no ya de atraer talento, sino de retenerlo, y estaremos expulsando de la provincia a los más cualificados, los cuales encontrarán en el resto de España o Europa mejores remuneraciones”.
El máximo responsable de Ineca ha agregado que “con estos recursos es muy difícil incrementar la productividad de las empresas por falta de capital humano, siendo francamente complejo adoptar las nuevas tecnologías y procesos que el mercado está exigiendo”. Ha remarcado que “no hay que olvidar que el incremento de salarios debe ligarse a la mejora productiva para mantener los niveles de competitividad, garantizando la sostenibilidad del sistema a corto, medio y largo plazo. Y es también imprescindible que las administraciones redoblen sus esfuerzos para generar un contexto político y socioeconómico capaz de generar la suficiente confianza institucional y seguridad jurídica, ingredientes indispensables para consolidar el nivel inversor en nuestra economía”.
Ineca considera que es el momento de diversificar el tejido productivo y enfocarlo hacia los sectores con mayor valor añadido, que al mismo tiempo son los que tienen mejores sueldos. “No se puede abandonar la posibilidad de desarrollar nuevos sectores de actividad en la provincia creando sinergias entre los sectores productivos industriales tradicionales y el sector de las nuevas tecnologías y la innovación. De hecho, es más que destacable ver cómo el sector agroalimentario está implementando la tecnología a sus procesos” ha destacado Ballester.
"A modo de conclusión, y valorando que los resultados de las variables analizadas nos indican que la provincia continúa recuperando músculo y, de hecho las variables del bloque social, así lo indican, ese músculo no es suficiente para distribuir energía suficiente a todo el sistema", afirma Ballester. "La provincia recupera potencial económico, pero no es suficiente para competir con el resto de provincias, que partiendo de una situación inferior a la nuestra, crecen más rápido en sectores muy arraigados como es el turismo, la construcción y la industria agroalimentaria". 2017 deja una serie de cuestiones que en Ineca quieren abordar desde el análisis. "Consideramos que los datos del último trimestre muestran que la recuperación de la provincia de Alicante es real pero, quizás carente de una estrategia global decidida. Alicante es una provincia que camina hacia adelante por inercia, porque sabe avanzar".
Rafael Ballester ha concluido señalando que “es importante que, entre los planes estratégicos de administraciones y empresarios haya sinergias con visión de futuro, y lo que nos dicen los indicadores es que esas sinergias se tienen que materializar cuanto antes, porque de lo contrario perderemos el tren que acaba de iniciar su marcha”. Por parte de Ineca, se va a profundizar en nuevos análisis con el fin de aportar la máxima información posible. Remar a favor o en contra de la corriente genera agotamiento. Ir en una misma dirección puede generar oportunidades. Estamos en ese momento, en el de fijar nuevos rumbos, reforzando y apoyando los ejes que tenemos. Y para ello podrán contar con nosotros.