ELCHE. Se va despejando la situación del ya exedificio de Zara del centro de Elche, otrora cine Capitolio. Como contó este diario, Inditex tenía encima de la mesa varias ofertas —una de ellas vinculante— para la venta del inmueble, el cual había cerrado una vez tenía ya distintas ofertas. La novedad es no solo que la multinacional textil ha rechazado la oferta que tenía 'bloqueada', sino que también ha rechazado una del propio Ayuntamiento.
Fue en verano, al calor del cierre del establecimiento del emblemático inmueble, cuando el Consistorio contempló la posibilidad de hacerse con el edificio, sondeando distintas alternativas para poder utilizarlo como instalación cultural. Así que en medio de las ofertas de los operadores privados, el equipo de gobierno también se 'coló' en la mesa, contactando para sondear la posibilidad de adquirirlo o plantear alguna opción de convenio, aunque sin concretar. Desde Zara se veía con buenos ojos la opción de que el Ayuntamiento comprar el edificio, aunque no hay capacidad para ello, así que finalmente se desestimó la opción municipal.
Así pues, el actual escenario es que la oferta vinculante que tenía prioridad, ha sido rechazada y al desbloquearse, el edificio vuelve a estar en venta. De hecho, ya se están valorando el resto de ofertas de los interesados que ya había. Una de ellas al menos, interesada en comprar la galería de Elche junto con un segundo establecimiento en Andalucía.
Con todo, los patrimonios privados interesados ya saben que tienen un inquilino seguro, que es el Consistorio ilicitano —si la voluntad es la misma— ya que estos fondos suelen hacerse con este tipo de inmuebles para después colocarlos para alquiler. Una opción que estos ven con buenos ojos, ya que además de ofrecerle una cantidad económica a Inditex, ya tienen un cliente muy jugoso como es el caso del Ayuntamiento, que tendría que entrar en alquiler al no poder comprar el edificio.
Desde el ámbito público era la única opción, ya que la Universidad Miguel Hernández (UMH) explicó el lunes que descarta instalarse allí porque no le interesa por las características del edificio. Eso sí, le van a pedir a la Fundación CAM una oferta firme, aunque no vinculante, por el edificio de La Glorieta, para valorar seriamente si hay opción de compra y si está interesada en desprenderse de parte de su patrimonio.
