MURCIA. En un mercado laboral en el que la mano de obra envejece; las habilidades digitales imperan y la competencia por atraer el mejor talento es global, a las empresas no les queda otra salida que plantearse el viaje del empleado como una necesidad para atraer y fidelizar a los mejores profesionales. La ruta abarca todo el recorrido de la persona por la empresa, desde que se la contrata hasta que se desvincula.
Para facilitar y acelerar el proceso de onboarding de un nuevo empleado en una compañía han creado en Zapiens una herramienta basada en microaprendizaje vía app para que las nuevas incorporaciones aprendan y retengan cuanto antes todo lo que necesitan saber sobre la empresa, incluso para contrataciones en remoto. Dice Daniel Suanchez, fundador de Zapiens, que su trabajo es “hacer pensar a la gente que está en las empresas”, una afirmación que puede parecer baladí, pero que es una fórmula muy acertada para mantener la motivación de los empleados.
No se trata tanto de sobrecarga de trabajo ni de tener la cabeza en movimiento todo el día como de ingeniárselas con propuestas nuevas que mantengan viva la motivación y no decaiga la productividad. Según los cálculos que barajan en Vitaance un solo empleado desmotivado en la empresa equivale a 57 días perdidos al año por baja productividad.
Vitaance es una startup nacida en 2021 de la mano de Ana Zamora, Bernard Granados y Christian Rochas con la idea de reinventar los seguros de vida. Ofrece a las corporaciones un seguro de vida diferente para sus trabajadores. Además de protegerles desde el punto de vista financiero, se preocupa por su bienestar físico, social y mental. Para ello han desarrollado una app que, mediante dinámicas de gamificación, incentiva a los empleados a cuidar cuerpo y mente e incrementa el trabajo en equipo. Cierran así el círculo apuntando al bienestar físico, mental, social y financiero.
Se ha convertido en una prioridad para las empresas teniendo en cuenta que no dejan de aumentar las bajas laborales por motivos de salud mental. Se estima que la depresión y la ansiedad en todo el mundo tiene ya un impacto de 12.000 millones de días de trabajo. En el caso de España, un estudio del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) pone de manifiesto que un 45% de los trabajadores considera estar expuesto en el trabajo a algún factor adverso para su bienestar mental. Los plazos de tiempo para cumplir objetivos o la sobrecarga aparecen como los causantes más sufridos conforme a lo declarado por un 32%.
Para medir el estado anímico y la salud mental de los trabajadores han desarrollado en Emocional una herramienta de inteligencia artificial. El software se dedica a cuidar de la salud emocional de los empleados consiguiendo, hasta ahora, que reduzcan su estrés en un 28%. El software se integra en las videollamadas y detecta el estado emocional de los empleados a tiempo real a partir de la comunicación no verbal: expresiones faciales, movimientos de cabeza y de las manos.
Emocional fue fundada en Girona por Pedro J. Espinosa García, psicólogo y CEO de la compañía, y Aniol Hervás Royo, ingeniero y COO. El equipo multidisciplinar lo integran ya 25 personas.
Pero, al margen de crear un espacio de trabajo amigable y dinámicas de salud mental, también hay estudios que apuntan a que las personas peor retribuidas por su desempeño laboral son más propensas a la depresión, más ahora con una pérdida de poder adquisitivo galopante. Las empresas tienen pues que plantearse pagar mejor.
También para esto surgen propuestas emprendedoras, como la retribución flexible, que plantean en Cobee o en Payflow; o la retribución variable a la que recurren muchas startups en sus fases iniciales.
En caso de falta de recursos, se pueden combinar medidas orientadas a la conciliación, la flexibilidad de horarios, programas de reconocimiento o el teletrabajo.
Así es como se refieren a los freelances en Shakers, una plataforma online que conecta a empresas con profesionales freelances, especialmente en el mundo digital y tecnológico. En el mercado laboral, el de los freelances es uno de los segmentos que más crece, pero también con cambios respecto al pasado.
Según el CEO, Héctor Mata, existen dos grandes bloques. Están, por un lado, los que se relacionan con la gig economy, los cuales trabajan en proyectos pequeños con la colaboración de uno o dos freelances y, por otro, las compañías que externalizan a equipos completos. Se trataría de empresas interesadas en desarrollar un proyecto nuevo pero, en lugar de hacerlo in-house, contratan a un equipo de 5 o 6 personas que trabajan en remoto para que lo desarrollen durante varias semanas. Este, a juicio de Mata, es el modelo que más crece teniendo en cuenta que los freelances son cada vez más exigentes y aspiran a trabajar en grandes misiones y equipos cualificados.
Para esto han creado ellos un método innovador y único a escala internacional que emplea la inteligencia artificial para conseguir el match perfecto. “En Shakers, creemos que el futuro del mercado laboral pasa por un entorno mucho más líquido. Cada vez vamos a ver menos organizaciones gigantes y más equipos super especializados, conectándose entre ellos bajo demanda. Hoy el mejor talento quiere decidir no solo la empresa, sino el proyecto en el que trabajar. Su flexibilidad y libertad ya están por delante de atributos más clásicos como la seguridad o estabilidad.”, sostiene Mata.
Crear algo que atendiese los servicios de directivos y ayudarles a conciliar mejor vida personal y laboral es lo que se plantearon Álvaro Sancho, Lourdes Carbó y Pilar DP antes de fundar niid.me. Se trata de una plataforma tecnológica que hace la vida más fácil a los ejecutivos y a sus familias concebida como una especie de asistente personal para la vida privada.
Se articula como una plataforma “conseguidora” a la que solo tienen que pedir. Atiende desde un recado hasta reservar un jet, realizar un trámite o encontrar entradas para un evento. Hecha la petición, niid la resuelve buscando en su red al experto adecuado en la materia.