BENIDORM (EFE). La patronal hotelera Hosbec ha informado que las consecuencias de la variante ómicron han dejado "en mínimos" la ocupación hotelera en la primera semana de 2022, días en los que no se ha superado el 50 % de camas ocupadas y que han dejado datos del 43,7 % de ocupación en Benidorm, del 34,6 % en la Costa Blanca, del 35,8 % en Valencia y del 49,8 % en la provincia de Castellón.
Desde Hosbec han lamentado este martes que, a pesar de no haber acabado, la variante ómicron del coronavirus ha dejado el segundo peor invierno de la historia del turismo en la Comunitat, después del 2021, al tiempo que han sostenido que esta cepa ha sido un "tsunami".
El colectivo ha subrayado que las previsiones para las próximas semanas "vuelven a ser complicadas" y que distintas empresas hoteleras han programado cierres ante las malas perspectivas de los mercados nacionales e internacionales.
"El sector se prepara para afrontar las semanas más difíciles desde la finalización del estado de alarma a la espera de la mejora de los datos sanitarios y de contagios que permitan recuperar pulso turístico", ha señalado el presidente de Hosbec, Toni Mayor, que ha lamentado los cierres hoteleros debido a los números "en mínimos" de esta primera semana.
La provincia de Castellón ha dejado durante la semana del 3 al 9 de febrero los mejores datos de toda la Comunitat Valenciana, ya que la ocupación se ha mantenido en un 49,8 % en toda la semana y el fin de semana ha rozado el 66 %, con 396 hoteles abiertos.
Benidorm ha concluido la primera semana del año con un 43,7 % de camas ocupadas, una cifra algo inferior a la vivida durante el fin de semana, en el que se logró un 45,1 % de ocupación, aunque las previsiones para esta segunda semana del año no superan el 33 %.
La Costa Blanca ha sufrido una caída en la ocupación que ha llegado a dejar dos de cada tres camas libres, con una ocupación del 34,6 % en toda la semana y solo el 39 % en el fin de semana.
En cuanto a la provincia de Valencia, los números también son negativos, pues 13 de cada 20 camas han estado libres, al no superar el 36 % de ocupación hotelera la primera semana de 2022 y llegar tan solo al 37,5 % durante el fin de semana.
Pese a ello, ha visualizado una primera previsión de recuperación: "Confiamos en que la normalidad pueda llegar a finales del mes de febrero, con expectativas de encarar la primavera y verano sin restricciones y con una situación epidemiológica normalizada".
No obstante, el presidente de Hosbec, Toni Mayor, ha destacado que Benidorm "mantiene en estos momentos unos 50 hoteles abiertos, que suponen unas 18.000 camas, lo que supone una cifra muy superior a muchos otros destinos españoles".
Pese a estas perspectivas, Mayor ha resaltado que "hay un colchón importante de turistas que desafían al coronavirus y que no desvían sus planes de viajar, los cuales son en su mayoría son extranjeros".
Así, ha subrayado la presencia de un 34 % de británicos en Benidorm "cuando todavía no se habían levantado las restricciones", al tiempo que ha destacado el 55 % de clientes hoteleros internacionales tanto en la Costa Blanca como en Benidorm, unos datos que contrastan el 65 % de turista nacional que recibe la provincia de Castellón.