ALICANTE. El rechazo que el nuevo concurso sobre la gestión del Centro de Acogida e Inserción (CAI) de Alicante ha generado entre la plantilla y entre la empresa que asume su prestación en la actualidad ha acabado derivando en la suspensión del procedimiento de contratación. El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC), adscrito al Ministerio de Hacienda, estimó a principios de agosto los recursos presentados por el sindicato CCOO y por la concesionaria del centro (la Fundación Salud y Comunidad) y acordó la paralización temporal del procedimiento hasta que se produjese la resolución del fondo de la impugnaciones presentadas, aunque sin afectar a los plazos de presentación de ofertas.
Esa paralización se mantiene hasta ahora, después de que el Ayuntamiento de Alicante haya elevado un informe técnico de respuesta a los argumentos expuestos en ambos recursos en los que se defiende la corrección de los pliegos propuestos. Por ahora, de las impugnaciones planteadas por los dos recurrentes ha trascendido la exigencia de que se incorpore la subrogación de la plantilla, así como la reincorporación de los servicios de cocina, enfermería, programas de inserción, mantenimiento o ropero que habrían quedado excluidos de la convocatoria.
Sin embargo, el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), viene sosteniendo al respecto que el pliego se ajusta a los servicios que se deben prestar de acuerdo con los cambios introducidos en la nueva regulación autonómica sobre ese tipo de prestaciones sociales y que, además, no existe obligación legal de exigir a los licitadores interesados en asumir la concesión que garanticen la continuidad de los empleados actuales.
El concurso se puso en marcha a mediados del pasado mes de julio por un importe de 1,3 millones (1.355.130,01 euros) por un año de duración, con una posible prórroga de otro año más. En principio, se estimaba que la nueva concesión se incorporase al frente del CAI este mes de noviembre. En esta línea, el plazo de admisión de ofertas se cerró a principios de agosto, con lo que se daba por hecho que se dispondría de un nuevo adjudicatario desde mediados del mes de octubre. No obstante, el desarrollo del concurso queda a la espera ahora de la resolución de las impugnaciones.
Entre tanto, la plantilla actual del CAI, compuesta por 35 trabajadores, prevé celebrar este jueves una nueva concentración ante la sede de la Concejalía de Bienestar Social para reclamar la continuidad de sus puestos y de los servicios prestados en las instalaciones municipales de la avenida del Doctor Jiménez Díaz.