Foto: PEPE OLIVARESELCHE. El pasado mes de junio la concejalía de Comercio y Aperturas presentó la modificación de la ordenanza de terrazas para hacerla más flexible y permitir implantarlas en otros lugares, así como la ordenación de requisitos según tamaño o necesidades de cada establecimiento. Medio año después, la solicitud que más está recibiendo Aperturas es la de ampliar las terrazas existentes. Paralelamente, la concejalía de la edil Caridad Martínez está en proceso de revisión de las que hay en toda la ciudad, cerca de unas 600, para ajustar las mismas a las necesidades del sector, y que estén dentro de lo que permite la ordenanza.
De hecho, la concejalía ya fue avisando porque desde julio volvió a cobrarse la tasa de mesas y sillas, y si querían modificar la terraza podían aprovechar para presentar su cambio, de lo contrario, se giraba la tasa de la situación previa a la pandemia. En este sentido, ya en su día se envió una circular para intentar mantener las aproximadamente 300 'terrazas covid', es decir, las ampliadas de forma extraordinaria, pero dentro de lo que permite la nueva ordenanza. "Muchas se han quedado", añade.
Así, el reglamento permitía también la solicitud por ejemplo de disponer de terraza solo para el fin de semana o periodos estivales, porque entre semana hacen falta menos dependiendo del negocio, pero son las que menos. La mayoría pide ampliar, "porque permite mayor rentabilidad". Lo que no obsta a que se está procediendo a esa ordenación. "Ahora se ve más el espacio porque se reparte la terraza según los metros y no según número de mesas, y se pueden utilizar las baldosas en las plazas". Pero Martínez insiste en que se trata de una ordenación "pormenorizada" para cada caso, y por ejemplo en Eres de Santa Llúcia, uno de los sitios de mayor afluencia en el centro, se han reordenado los espacios para mesas y sillas en la parte superior para que quede paso peatonal.
Por otra parte, y fuera del centro, lo que también se está solicitando mucho es la instalación de pérgolas. Antes solo podían ser toldos exentos y sombrillas, "y ahora sí que hay zonas que estamos estudiando permitir pérgolas. Hay una previsión a fondo de todas las situaciones". Eso sí, siempre hay casos para todo, algunos establecimientos han seguido con las terrazas puestas sin saber que se estaba revisando y que su realidad no la recoge la ordenanza actual o el pago de la tasa.
También está la picaresca, que Martínez no oculta, ante el volumen de terrazas existentes. "La policía está viendo que se está cumpliendo por lo general la ocupación, que además se contrasta con las actas". Y aunque algunos se pasan, "los vecinos también se quejan, y en ese momento se comprueba in situ qué está pasando". Si los agentes acuden y revisan, puede haber sanción. "Si las infracciones son muy habituales podemos incluso retirar la autorización de terraza", recuerda la edil.
Por último, apunta la responsable de Comercio y Aperturas que lo que se ha detectado es que últimamente lo que sí se está cumpliendo en general son los horarios, tanto de hostelería como de ocio. Algo que directamente vincula también a los nuevos hábitos, ahora con el tardeo más en boga. Eso sí, de lo que más molesta, y sigue pasando, es el ruido de la retirada o puesta de la terraza con el arrastre de mesas y sillas. Pero por lo pronto, lo que más ha traído consigo la modificación de la ordenanza es un mayor número de terrazas o ampliación de las mismas.
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