ELCHE. Convertir la ciudad en la capital del teatro durante unos días puede sonar pretencioso, pero la realidad es que el El Festival Internacional de Teatre d'Elx (Fitelx) cumple con los requisitos para serlo en su entorno. O al menos va camino de ello. En este 2018 el evento llega a su cuarta edición, en la que una vez más, se demostrará el potencial artístico que respira la ciudad, no sólo a nivel de materia prima, sino también de público, ávido de propuestas como esta, como demuestra la afluencia para la propuesta de microteatro.
Del 28 de julio al 5 de agosto, Fitelx tomará L'Escorxador como su principal sede de operaciones, pero también se trasladará al Gran Teatre, al cine Odeón y al espacio público en la Plaza de Santa Isabel. Y por supuesto, el Convento de Las Clarisas, donde se desarrollará se podría decir que la propuesta más aclamada, el microteatro, que tendrá una mayor connotación social. Es la perla del festival, como demuestra que ya se han agotado las entradas para verlo, aparte de que se ha tenido que abrir un pase más, también repleto y con una lista de espera de 60 personas. En total, nueve pases diarios en los que el año pasado se acercaron casi 600 personas, como la previsión de este año, y donde se podrán ver las dotes artísticas de una cuarentena de actores y actrices locales.
Respecto al propio microteatro, también habrá un taller de sobre este, impartido por el sevillano Ramón Perera, al que se han inscrito mediante convocatoria y de forma gratuita 39 actores y actrices de la provincia, tanto profesionales como amateurs. Asimismo, también habrá obras para mayores de catorce años, con invitación, actuaciones de clowns y una exposición de fotos. Esta última es una de las novedades de este año. Ya está expuesta en L'Escorxador hasta el 5 de agosto, se titula 'Miradas' y tras ella está Laila White, mostrando el resultado de algunas instantáneas resultado de un Taller realizado en Danza Mobile —quien abrirá el certamen— y coordinado por Javier De la Calle. A algo más de distancia, en el cine Odeón, se proyectará 'Que nadie duerma', de Mateo Cabeza, que ha hecho un seguimiento inmersivo a la compañía Danza Mobile durante la construcción de una de sus obras, 'En Vano'.
Asimismo, otra novedad es que este año habrá que pagar entrada para ver las obras de teatro de L'Escorxador, para evitar que se queden butacas vacías como el año pasado, y de paso para recaudar fondos para el festival. Eso sí, será a precios testimoniales: 5 euros. Además, y como explica la directora del festival, Eva Latorre, cada año va subiendo el nivel. Este año, hay obras de tinte feminista como 'Trinidad', desde Madrid; 'Solituds', desde Girona, con amor por la ciencia ficción; 'El Percusionista', desde Guinea Ecuatorial y adentrándose en la música popular, o también obras ilicitanas, como 'Fémina' de Maracaibo Teatro.
Por último, y como colofón, el viernes 3 de agosto, una vez más en L'Escorxador, tendrá lugar otra vez Fitelx de Nit, con entrada libre, en el que habrá manifestaciones artísticas de todo tipo: teatro, conciertos, circo o danza, además del obligatorio sopar de cabaset ilicitano. Además, se organizarán tres o cuatro obras durante el año para que esta conjunción de artes no quede sólo en esta semana. En definitiva, la ciudad será una, nuestra, capital del teatro, aunque sea durante unos días, celebrando la pasión por este arte que tanta tradición tiene en Elche desde décadas.