El aumento del autoconsumo, de los parques foltovoltaicos o la mejora del almacenamiento energético, unido a proyectos como los de Volkswagen, Ford y BP resaltan la apuesta de la Comunitat por las renovables, con el objetivo puesto en generar 10.000 megavatios de renovables en el horizonte 2030, bien a través de proyectos de autoconsumo, de la puesta en marcha de parques solares o bien con el impulso a las Comunidades Energéticas Locales. La descarbonización de la economía de la Comunitat Valenciana es un hecho y avanza poco a poco.
En ello ha influido la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica de la Comunitat Valenciana, aprobada en diciembre de 2022, que específica como uno de sus objetivos prioritarios la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, de al menos el 40% para 2030, y neutralidad para 2050.
Para ello, no solo hacen falta inversiones en renovables, también apostar por el almacenamiento energético o la búsqueda de nuevos combustibles como el hidrógeno verde y los biocombustibles, proyectos que, en muchos casos, están impulsando desde los institutos tecnológicos de Redit, para avanzar hacia esa economía verde y la neutralidad de las emisiones, tal y como se refleja en el Especial Energía Sostenible de la revista Plaza del mes de junio.
Además, en este especial se recogen las inversiones y proyectos de empresas como Caixa Popular, Iberdrola, la Oficina de la Energía de la fundación València Clima i Energia, PVH, Statkraft, Bet Solar, Cubierta Solar, Grupotec, Exclusivas Energéticas, iGex o SFI Consulting.
Las lluvias torrenciales del 29 de octubre provocaron la mayor catástrofe natural que se recuerda en España. Un desastre que ha afectado a las poblaciones de setenta municipios y ocho pedanías de Valencia y cuyas historias llevamos a la portada de noviembre de Plaza. Además, conocemos a Marina Fita, una joven promesa de la ópera, y como las empresas embotelladoras de agua son una fuente de vida contra la despoblación en el interior de Castellón, entre otros temas