Un operario en el polígono de Ibi durante el estado de alarma. Foto: PEPE OLIVARESALICANTE. El plan para el desconfinamiento por fases planteado este martes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha generado muchas dudas en las empresas que habían tramitado ERTE tras la declaración del estado de alarma para aligerar la masa salarial mientras estaban obligadas a permanecer cerradas. Con las distintas fases trazadas por el Ejecutivo, muchas de estas empresas ya no están obligadas a seguir cerradas, pero abrirán con notables restricciones a sus negocios.
Así, el procedimiento que perfilan Generalitat Valenciana, CEV y sindicatos apuesta por lo que se ha venido en denominar 'ERTE dinámico': es decir, que la empresa vaya incorporando personal en función de las necesidades de producción. En teoría, la vigencia de los expedientes aprobados por fuerza mayor, como es la pandemia, vence cuando esta fuerza desaparece. Es decir, al levantar el estado de alarma, las empresas deberían revertir los ERTE. Y además, están obligadas a mantener todos los empleos durante seis meses.
Un escenario que pocos pequeños empresarios pueden afrontar en estos momentos, máxime cuando los comercios y la hostelería reabrirán bajo mínimos (un 30% de las terrazas aquellos que la tengan, y en una siguiente fase un 30% del interior). Así, patronal, sindicatos y Consell han acordado que la reversión de los ERTE se realice de forma escalonada, a medida que los negocios vayan recuperando capacidad. Es decir, reincorporar al 30% de la plantilla si el negocio va a abrir al 30% de la capacidad, y así sucesivamente.
Precisamente para contar con más tiempo para revertir las regulaciones de empleo, la CEOE ha planteado al Gobierno que la vigencia de los ERTE tras la finalización del estado de alarma se prorrogue durante seis meses adicionales, como defiende la Generalitat para el sector turístico a petición de Hosbec. No obstante, fuentes consultadas por Alicante Plaza consideran que el Ejecutivo dejará finalmente en tres meses ese plazo extra para poder convertir los ERTE en 'dinámicos'.
En este sentido, el presidente de CEV, Salvador Navarro, consideró este jueves que la "falta de concreción" en el 'Plan de transición hacia una nueva normalidad' obliga a que vaya acompañado de "una mayor flexibilidad" en los ERTE por fuerza mayor y las medidas para dotar de liquidez a las empresas. La patronal, teniendo en cuenta que la recuperación "no será inmediata", pide que los ERTE puedan prorrogarse "un mínimo de seis meses más, de modo que las empresas puedan modular sus recursos al grado de actividad en cada fase.
Por su parte, las secretarias generales de UGT y CCOO en l'Alacantí, Yaissel Sánchez y Consuelo Navarro, consideraron, a preguntas de Alicante Plaza durante su comparecencia con motivo del 1º de Mayo, consideraron que los ERTE deberían revertirse "cuando vence el objeto por el que se aprobaron", aunque "respetando las fases de la desescalada". Asimismo, defendieron que este proceso se haga con una ingente labor de adopción de medidas de seguridad, y sobre todo "que no entre todo el mundo de golpe, que se mantenga el teletrabajo, se realicen rotaciones y se respete el distanciamiento".
Hasta este miércoles, las empresas de la Comunitat Valenciana han presentado 63.116 ERTE que afectan a 378.195 trabajadores, de los que la Conselleria de Economía ha resuelto el 85% del total, que engloban a 289.388 empleados (el 76 %). Del total de expedientes resueltos 22.006 lo han sido por la provincia de Alicante.
Durante la situación de crisis sanitaria se registraron casi 14 millones de contagios y más de 122.000 muertes, de las cuales un 8,65% se produjeron en la Comunitat Valenciana
