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El termómetro de 2021: así les fue el año a 24 de los políticos de la Comunitat más destacados

31/12/2021 - 

ALICANTE. La pandemia ha marcado en buena medida la vida política a lo largo de 2021. Algunos políticos han sabido hacer de la necesidad virtud y salir reforzados de la situación, mientras que otros han pagado el desgaste de esta u otras situaciones que les han condenado a una situación de debilidad política. De la misma manera, hay dirigentes que han sabido navegar al margen de problemas de gestión o procesos orgánicos, cumpliendo así un ejercicio sin demasiados sobreasaltos.

Como cada año, la redacción de Alicante Plaza ha elaborado su particular termómetro en el que se mide la temperatura de 24 políticos destacados de la Comunitat. A los que mejor les ha ido el año se les considera 'on fire' y vienen marcados con el color rojo que se transforma en un tono más templado que va menguando hasta alcanzar la zona azul de frío, que termina en el gris propio de los que han dado un paso -voluntario u obligado- a un lado de la primera línea. 

Para bien o para mal, estos son 24 de los protagonistas políticos del año para este medio.


1. Carlos Mazón. El dirigente popular está de dulce: 2021 será el año que le puso de forma definitiva en la primerísima línea política con el reto y la responsabilidad de recuperar la Generalitat para su partido. Para ello, Génova le dio un respaldo sin fisuras con el que se convirtió en el nuevo presidente regional y él devolvió el favor con un deslumbrante mitin en la Plaza de Toros de València. Los sondeos -o al menos los que maneja su partido- le otorgan posibilidades de ganar las elecciones por lo que, este año, ha sido más que completo para el nuevo líder del PPCV.

2. Diana Morant. La exalcaldesa de Gandia recibió la llamada de Pedro Sánchez para convertirse en ministra de Ciencia e Innovación. Un nombramiento que, acompañado de ceses como el del valenciano José Luis Ábalos, la situó como referente valenciana en Madrid. Además de eso, la designación ha conllevado que se le empiece a situar entre las posibles sucesoras de Ximo Puig. Sin duda, un año que no olvidará.

3. Ximo Puig. El presidente de la Generalitat ha sabido surfear la pandemia. Empezó mal, muy mal, con la catástrofe sanitaria de enero tras no haber tomado las medidas restrictivas necesarias. No obstante, la vacunación masiva y, en general, sus decisiones sobre la pandemia y de cara a la recuperación económica posterior, y también su creciente protagonismo en la política nacional, le han conferido una imagen sólida. Todo ello acompañado de una buena relación con Pedro Sánchez y de su reelección como líder del PSPV, alejados ya los fantasmas de su oposición interna 'abalista'.

4. Héctor Illueca. Otro que no olvidará 2021 es el vicepresidente segundo del Consell. El adiós de Martínez Dalmau trajo de Madrid a un valenciano que ha llegado sin hacer demasiado ruido pero para quedarse. Illueca se perfila ya como futuro candidato de Podem a la Generalitat, pero también se le intuye un papel activo en la articulación de la plataforma que pretende impulsar Yolanda Díaz. En el Consell, pocos roces se le conocen hasta el momento, a la espera de que pueda desarrollar las políticas correspondientes en materia de Vivienda. Un buen año.

5. Luis Barcala. El alcalde de Alicante ha consolidado su acción de gobierno, aunque a veces su equipo de gobierno deba ceder en demasiados ámbitos para asumir determinados postulados de Vox. Pese a ello, Barcala no ha tenido problema en sacar los grandes asuntos del ayuntamientos y desplegar un ambicioso plan de inversiones que abarca a la mayoría de concejalías y a casi todos los barrios. Además, está considerado como el principal bastión municipal del PP, tiene presencia en la FEMP y línea directa con Génova.

6. Carlos González. El alcalde de Elche también ha exhibido líneas básicas claras en su gestión, pese a los nubarrones en Transparencia con la oposición y el affaire de las exhumaciones. La ciudad cuenta con un gobierno sólido, en el que los dos partidos, PSPV y Compromís, tienen claras sus líneas de actuación. Por fin se ha desbloqueado la ubicación del centro de congresos de la ciudad, con consenso y en la que González ha mostrado altura de miras al ceder en su posición, así como el futuro del Mercado Central, aunque con una solución para el provisional que también ha generado polémica. La gran apuesta fue la peatonalización de la Corredora, que ha resultado ser un instrumento de revitalización económica.

7. Ana Barceló. La consellera de Sanidad sigue firme y estable ante viento y marea. Pese a que muchas de sus decisiones al frente de este complicado departamento puedan cuestionarse, la realidad objetiva es que la pandemia le ha proporcionado un grado de notoriedad que, además, se refleja como positivo en muchas encuestas. Tanto es así que, en el PSPV, ya se plantean embarcarla como candidata a la Alcaldía de Alicante. Más allá de si se produce algún cambio en el Consell que pueda afectarle, 2021 ha sido un año difícil para ella pero también positivo en su carrera política.

8. Arcadi España. El titular de Obras Públicas tampoco puede quejarse del año que deja. Incluido en la Ejecutiva Federal de Pedro Sánchez gracias a la petición de Ximo Puig, el conseller también gana enteros para una carrera a largo plazo en la primera línea política. Por si fuera poco, el Gobierno ha destinado 300 millones de euros para que gestione inversiones desde su cartera, lo que le deja, si no hay cambios, en una posición envidiable de gestión para el próximo ejercicio.


9. Vicent Marzà. El conseller de Educación ha visto este año como avanzaba su proyecto de refundación del Bloc -ahora Més Compromís- y ha logrado que la pandemia no haya trastocado demasiado la vida en las aulas. Sin embargo, también ha sufrido reveses de los tribunales en su gestión y los clásicos tiras y afloja que, en muchos casos, provienen de sindicatos de enseñanza con los que existe una coincidencia ideológica. Por todo ello, Marzà medita dejar la conselleria y convertirse en portavoz de Compromís en Les Corts. Sea cual sea su decisión, es evidente que debe dar un paso adelante en 2022 para ir cogiendo mayor protagonismo para el futuro. En cualquier caso, tampoco ha sido un mal año para el conseller.

10. Joan Baldoví. El portavoz de Compromís en el Congreso ha tenido un año similar a otros pero esto no deja de ser noticia. En un campo de batalla político tan complejo como la Cámara Baja, tiene mérito -siendo un único diputado y casi nunca numéricamente determinante- seguir encontrando ejercicio tras ejercicio motivos para ser visible. Se ha hecho un fijo en televisiones nacionales y continúa dando que hablar, aunque empiece a percibirse ya cierto desgaste de una de las figuras más destacadas de Compromís. En 2021, ha seguido ahí, que no es poco.

11. Gabriela Bravo. La consellera de Justicia ha tenido un año difícil en la gestión -teletrabajo, decreto lingüístico, bomberos...- con luces y sombras. Una de las cuestiones que más se fue complicando fue el papel de su departamento en el levantamamiento -y ahora desmontaje- de los hospitales de campaña. De la misma manera, también es comentario habitual dentro del PSPV las constantes entradas y salidas dentro de su conselleria. Al margen de estas cuestiones, Bravo sigue siendo una de las fijas del Gobierno valenciano.

12. Enric Morera. El presidente de Les Corts ha tenido un año relativamente cómodo al frente de la cámara más allá de la problemática organizativa relacionada con la covid. No obstante, el histórico dirigente nacionalista ha planeado jugar una vida extra lanzándose al ámbito local y postulándose para estar en la lista del Ayuntamiento de València. Una posibilidad que no ha sido mal acogida en su partido. En un puesto tranquilo pero siempre en movimiento, Morera ha utilizado 2021 para comenzar a posicionarse para los cambios futuros.

13. Alejandro Soler. El diputado ilicitano y líder del sanchismo en la provincia de Alicante ha tenido la habilidad de que la caída de José Luis Ábalos le afectara lo más mínimo. Ha esperado su momento para lanzar la candidatura a la secretaria general del PSPV en la provincia de Alicante, pese a las presiones que ejerce la cúpula del partido en València para que no tenga ni un minuto de gloria. Quizás ha perdido influencia en el Gobierno central, en parte por la marcha de mucho de los primeros ministros de Sánchez, incluido el propio Ábalos, pero la mantiene en Ferraz, justo en el momento en el que las relaciones entre el propio Sánchez y Puig pasan por un buen momento.

14. Toni Francés. El alcalde de Alcoy y portavoz del grupo socialista en la Diputación de Alicante tiene el respaldo del partido para ser el futuro secretario general del PSPV en la provincia de Alicante, lo que puede suponer un punto de inflexión en su trayectoria. Esta oportunidad contrasta con el desgaste que está teniendo en la Alcaldía de Alcoy por proyectos como la peatonalización del centro de la ciudad, no siempre bien recibidos -ahí está el ejemplo de lo que sucedió en Elche-. En la Diputación comenzó el año muy bien con las críticas a las vacunas vip del diputado de Deportes y alcalde de La Nucía, pero el protagonismo del PSPV se ha diluido al centrar las críticas en el boicot del PP y CS al Fondo de Cooperación de la Generalitat. Ahora bien, Francés es de lo pocos que ha puesto negro sobre blanco el colapso que vive la Diputación y su escaso nivel de ejecución presupuestaria.

15. Toni Pérez. El alcalde de Benidorm es el flamante presidente del PP provincial de Alicante. Toma el relevo de Carlos Mazón, que ha pasado a responsabilidades mayores con el reto de devolverlo como el partido más votado de la provincia de Alicante, condición que perdió en 2019. Además de su nueva responsabilidad política, Pérez ha aprovechado la pandemia para introducir cambios importantes en la trama urbana de la ciudad, además de defender al sector hotelero y hostelero, uno de los más damnificados con las restricciones.  Quizás el principal sinsabor haya sido el de vivir en primera persona el impacto que la pandemia ha tenido en su ciudad.

16. Ana Serna. La alcaldesa de Albatera es la nueva secretaria general del PP en la provincia de Alicante y tiene mando en plaza en el partido. Además del protagonismo que ha adquirido en la defensa de los recursos hídricos desde la Diputación, Serna está llamada a responsabilidades mayores si el PP alcanza mayores cuotas de poder.


17. Vicent Soler. El año del conseller de Hacienda es difícil de analizar. El Botànic aprobó sus séptimos presupuestos pero, en esta ocasión, el peso lo llevó una comisión política solicitada por Compromís y Unides Podem para, precisamente, evitar que Soler tuviera la última palabra. El prometido documento por el Ministerio de Hacienda sobre la financiación, aunque tarde, llegó, pero tampoco queda claro en qué lugar dejará a la Comunitat Valenciana. Algunos en el entorno de Puig abogan por relevar al histórico dirigente socialista aunque el presidente siempre ha apostado por él. No ha sido su mejor año, no ya por los resultados, sino por el sufrimiento transitado.

18. Mónica Oltra. La vicepresidenta primera del Consell ha tenido un ejercicio difícil. La condena de su exmarido por abusos sexuales sobre una menor fue un golpe para la líder de Compromís, más áun cuando las posibles consecuencias para su conselleria aún colean. La relación con Puig se percibe desgastada y su posición en la coalició valencianista, aunque sólida, ha perdido el brillo de otras etapas. No obstante, Oltra se destapó recientemente con su alianza con Yolanda Díaz, lo cual ha vuelto a generar cierta expectación a su alrededor. El año próximo será clave.

19. Bernabé Cano. Su vacunación VIP le ha convertido en el centro de las críticas políticas y le situado, de nuevo, en la diana judicial. A diferencia de otros alcaldes que también se vacunaron sin corresponderle, Cano además lo hizo con toda la propaganda posible, algo que no ha pasado desapercibido para la jueza que instruye el caso, y saltándose los protocolos de una residencia. Su situación provocó una importante crisis en la Diputación de Alicante, que le costó el cargo y el sueldo. Pase lo que pase en el futuro, no podrá olvidar el 2021.

20. Emilio Bascuñana. Cuando parecía que la situación judicial de su pasado como asesor de la Conselleria de Sanidad pasaba a un segundo plano, ahora el PP provincial le ha montado una gestora en su ciudad, que, aunque la presida un concejal de su confianza, no transmite buenas sensaciones para su futuro político. Da la sensación de que el PP quiere borrón y cuenta nueva en Orihuela. A ello se suma la convivencia que mantiene con sus socios de Gobierno, Ciudadanos, en el ayuntamiento, con divergencias notorias e incapaces de aprobar unos presupuestos.  

21. Toni Cantó. El exlíder de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana se sitúa en un puesto casi 'helado' del termómetro en lo que se refiere a su papel autonómico. Su portazo a la formación naranja y su éxodo hacia Madrid junto a Isabel Díaz Ayuso, han provocado su desaparición del mapa en tierras valencianas. No se sabe si el PPCV tratará de repescarlo en un futuro para las elecciones autonómicas pero, a día de hoy, Cantó parece haber reconstruido su papel en Madrid.

22. Rubén Martínez Dalmau. El ex vicepresidente segundo del Consell decidió regresar a la docencia en el ecuador de la legislatura. También de manera voluntaria, como Ferri, pero tras no pocas tensiones con la líder de Podem, Pilar Lima. Desde entonces, el profesor de Derecho Constitucional ha desaparecido de la primera línea y no parece que la eche de menos, disfrutando así de su particular y voluntaria 'criogenización' política.

23. Isabel Bonig. La peleona exlíder del PPCV apuró sus opciones de repetir al frente de la formación popular en la Comunitat Valenciana. Sin embargo, la castellonense dio finalmente un paso a un lado tras constatar que Génova había apostado definitivamente por Carlos Mazón. Pese a que sonaron diversos puestos, Bonig se marchó con elegancia a la zona de hibernación política tras un denodado esfuerzo, con sus aciertos y errores, en mantener vivas las siglas de la gaviota en el ámbito autonómico.

24. José Luis Ábalos. Cierra el termómetro el exministro de Transporte y ex secretario de Organización del PSOE. Aunque todavía en activo, pocas veces se observa una caída tan rápida y abrupta la de un dirigente que ostentaba tanto poder. En las filas del socialismo valenciano, muchos aún se preguntan qué ocurrió para que Pedro Sánchez decidiera prescindir de uno de los estrategas que le ayudó a ser líder del PSOE en dos ocasiones y a alcanzar La Moncloa. En cualquier caso, 2021 ha sido un año horrible para Ábalos.

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