ELCHE. El lunes tuvo lugar la sesión plenaria de septiembre, otra en la que se han abordado cuestiones relacionadas con la pandemia y su lucha contra ella. Eso sí, desde diferentes perspectivas. Mientras que el bipartito anunció que finalmente se ampliará a todo 2021 la exención de la tasa de mesas y sillas y de ocupación pública, el Partido Popular intentó sacar adelante medidas de apoyo al sector del ocio nocturno, aunque en balde. Ciudadanos presentó una enmienda que se aceptó, pero no las dos planteadas por los socialistas. Así que salvo que el bipartito apruebe próximamente una línea de ayudas o lo tenga pensado para los presupuestos, no hay prevista una partida para el sector.
Precisamente en el debate de la moción sobre el ocio nocturno, tanto el edil de Comercio Felip Sànchez como el de Promoción Económica, Carles Molina, adelantaron que finalmente el año que viene también será de exención en la tasa de mesas y sillas y ocupación de espacio público. Lo que se había aprobado inicialmente era el primer semestre del año, hasta el 30 de junio. Sin embargo, las perspectivas sanitarias y económicas no permiten que se vislumbre un final claro sobre la pandemia. Y dado que aún existen importantes restricciones de afluencia y horario, además de un sector, el hostelero, que pende de un hilo como advirtió hace unos días junto a Aesec, finalmente se eximirá de este pago durante todo el año próximo.
Al igual que ha ocurrido en 2020, la previsión es que el no abonar esta tasa suponga una merma de entre 900.000 euros y un millón de euros de ingresos en las arcas municipales. Una cifra que engloba a todos los afectados por esta tasa, mercados inclusive, y que solo en la hostelería suponen 400.000 euros de ahorro. Según el edil socialista Carles Molina, suelen pagar 350 euros trimestrales en este concepto, por lo que lo considera como una "ayuda directa" el ahorro de esta tasa.
Por otra parte, y ya en el plano del ocio nocturno, el portavoz adjunto del PP, José Navarro, presentó la moción para "dignificar la imagen del sector de la hostelería y del ocio nocturno". Un concepto, el de 'dignificar' que fue rechazado por el bipartito al señalar que nadie está denostando el sector, sino que si tiene restricciones es por las medidas sanitarias. En cualquier caso, Navarro planteó varias actuaciones en la propuesta: la cesión de espacios públicos para eventos varios, exención de tasas como la basura "porque están pagando impuestos por una actividad que no realizan", la homologación de horarios en locales de hostelería y restauración y un plan de ayudas directas.
Ciudadanos presentó una enmienda que fue aceptada para para aplazar moratoria y prestaciones y pago de tributos, así como un plan nacional de ayuda al sector. En cambio, el PSOE propuso eliminar los puntos de la exención de la tasa de la basura y la homologación horaria. De la primera aseveraron que es un servicio de recepción obligatoria y no se puede eximir el pago, "avalado por el Supremo", matizó Molina. También apuntó que en la homologación de los horarios están trabajando con la Conselleria, "porque es ilegal" al no tener competencias para modificarlos.
Sin embargo, Navarro replicó que es cuestión de voluntad política porque en Aspe se están homologando esos horarios entre los establecimientos para no perjudicar a unos frente a otros, y que si hay intención de evitar el pago de la tasa de la basura, podrían presentar desde el bipartito una bonificación. Finalmente, se enquistó el debate como se veía venir y la moción no salió adelante. Sànchez justificó que "se podría haber facilitado el entendimiento para llegar a un acuerdo quitando esos dos puntos", y que ellos ya se han reunido con el Colectivo Hostelería varias veces, que incluye a parte del ocio nocturno.
Por su parte, Molina, aseguró que "nos hubiese gustado apoyar, pero era una moción trampa. Nos obligan a votar no por esas dos enmiendas". "Buscan que votemos en contra, todos los puntos los tenemos acordados con ellos", dijo sobre el PP. Navarro les acusó de enmendar para buscar obstáculos y no para aportar. Al final, no hubo voluntad de presentar alguna transaccional o de ceder, y no se aprobó la medida. Todo el bipartito votó en contra y la oposición a favor de la propuesta.
Eso sí, vistos ya estos primeros escollos económicos, así como los enfrentamientos y críticas del PP al gobierno, en los que no faltaron menciones al "casoplón" de Pablo Iglesias o a las herriko tabernas, sin faltar calificaciones de "papanatas" o decir del bipartito que vive en una realidad paralela, hoy por hoy parece que un hipotético apoyo del PP a unos presupuestos municipales para 2021 marcados por la covid-19 se antoja casi imposible. A pesar de las buenas palabras de todos tras las reuniones. Habrá que esperar a los próximos meses.