Los portavoces de la Asociación Contra el Ruido de Elche. Foto TeleelxELCHE. La Sección Tercera de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha anulado el artículo 3.1 de la Ordenanza reguladora de la Tasa para la contaminación acústica de Elche que aplicaba el coste de las sonometrías sobre el vecino que pedía la actuación. La tasa se aprobó en el pleno en diciembre de 2012.
La Asociación Afectados por el Ruido de Elche se opuso desde el principio a la misma y recurrió al TSJCV apelando al principio conocido como de acción preventiva y al hecho de que quien contamina es el que debe de pagar. Ahora, el TSJCV les ha dado la razón y ha anulado una tasa que suponía un desembolso de hasta 300 euros.
La resolución, a la que ha tenido acceso Europa Press, recoge que "entre otros principios que han de informar la política europea de medio ambiente" se encuentran los de "quien paga contamina" y "el de acción preventiva frente a la contaminación".
"De dichos principios", añade la sentencia, "cabe extraer que las denuncias de supuestos focos de contaminación acústica que, a la postre no se demuestran como tales, debe ser consideradas asimismo como una manifestación de la acción preventiva y que, en atención a tal consideración, los costes que de dichas denuncias se deriven habrán de ser asumidos por los titulares de las actividades efectivamente contaminantes".
La sala sostiene que "una faceta de la acción preventiva frente a la contaminación acústica viene constituida por la investigación eficaz de posibles focos contaminantes" y apostilla que es investigación comienza "bien de oficio" o "bien previa denuncia de los ciudadanos -normalmente, los afectos por el ruido-".
La tasa de 300 euros fue bonificada en hasta un 90% por el Ayuntamiento de Elche en determinados supuestos, si bien esa circunstancia fue también tumbada por la Justicia hace unos meses. La letrada Manuela Navarro, miembro de la asociación, ha valorado en una rueda de prensa, este miércoles, "positivamente" la resolución judicial y ha destacado que es la primera de sus características que se conoce, pudiendo servir a partir de ahora para que en otros municipios españoles se puedan impugnar tasas como la anulada en Elche.
"Es una grata noticia, no sólo para los ilicitanos sino para muchos municipios de España que siguen aplicando ese tipo de tasas", ha apuntado Navarro, que ha explicado que el coste de la sonometría recaería en el vecino que solicita su realización siempre que se demuestre que en la denuncia existe "mala fe o temeridad".
La Asociación de Afectados por el Ruido de Elche ha hecho pública la sentencia del TSJCV coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido, que se celebra bajo el lema 'El ruido es enemigo del confort acústico'.
