ALICANTE. Los tres partidos aliados al frente del Ayuntamiento de Alicante (PSOE, Guanyar y Compromís) piden disculpas por el segundo cambio de nombres llevado a cabo en apenas tres meses en unas 40 calles de la ciudad. Lo hace por escrito en una comunicación remitida desde la Concejalía de Estadística a lo largo de las últimas dos semanas en la que se explica de forma pormenorizada las causas de la sucesión de modificaciones.
La circular, con una extensión aproximada de un folio, podría resumirse en una sencilla conclusión: el Ayuntamiento se ha visto obligado a reponer los nombres retirados en diciembre en cumplimiento de un mandato judicial. Así se concreta en su último párrafo: "Lamentamos las molestias que el cumplimiento del auto judicial pueda acarrear a la ciudadanía, provocado por circunstancias totalmente ajenas a la voluntad de este Ayuntamiento".
Eso sí, el texto ofrece un relato detallado del proceso seguido para defender las decisiones adoptadas y no llega a mencionar que esa orden judicial llega a instancias de un recurso presentado por el PP contra las supuestas incorrecciones -de trámite y de fondo, según los populares- cometidas en la revisión del callejero. Es decir, mantiene un tono neutro y en ningún momento responsabiliza al principal partido de la oposición del enredo. Eso sí, tampoco refleja que el primer cambio se adoptó sin esperar a que el juzgado se pronunciase sobre la petición del PP para que ese proceso quedase paralizado hasta que se juzgase el fondo del recurso.
La carta explica que la Junta de Gobierno acordó el pasado 15 de noviembre una lista de 46 nuevos nombres para otras tantas calles que hasta ahora mantenían nombres con referencias franquistas, con el objetivo de cumplir las determinaciones de la Ley de Memoria Histórica. El texto concreta que las nuevas denominaciones fueron acordadas tras un "proceso de participación ciudadana" y refiere las causas que justificarían cada cambio concreto (hay un modelo de carta informativa detallada por cada una de las calles afectadas) con una explicación de quién era la figura que daba nombre a la calle hasta el pasado mes de diciembre (cuando las placas fueron retiradas por primera vez) y quién era el personaje o la referencia por la que se había acordado sustituirlo.
La carta anticipa a los residentes un nuevo cambio de nomenclatura en el caso de que el juzgado avale el proceso seguido para adaptar el callejero a la Ley de Memoria Histórica
Acto seguido, la circular precisa que el juzgado de lo Contencioso número 4 acordó suspender la actualización del callejero "hasta que recaiga sentencia sobre el fondo del asunto". Esa sentencia todavía no se ha dictado, por lo que dicha primera "decisión judicial obliga a este Ayuntamiento a mantener el nombre primitivo franquista de esta vía". "Si cuando el juzgado resuelva sobre el fondo del asunto la autoridad judicial da la razón al Ayuntamiento, se procederá a nombrar la vía con el nombre nuevo en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica", añade.
Como informó este diario, el equipo de Gobierno inició la reposición de las placas retiradas hace menos de un mes, el pasado 10 de marzo, justo el mismo día en el que el juzgado había emitido una nueva resolución en la que emplazaba al Ayuntamiento a restituirlas de manera inmediata en cumplimiento del auto que había emitido en enero. PSOE, Guanyar y Compromís lamentaron entonces tener que volver a colocar los rótulos retirados con referencias franquistas y responsabilizaron al PP en sus declaraciones públicas del "regreso al NO-DO", como subrayó la edil de Memoria Histórica, María José Espuch. Su partido, Compromís, difundió este jueves un vídeo en redes sociales con ese mismo mensaje.