El PP respira con la Diputación de Alicante: el 'efecto Vox' será limitado a una comarca

ALICANTE. Si el PP tenía algún temor a disminuir el número de diputados provinciales en la futura Diputación de Alicante por el efecto Vox puede, cuando menos, respirar. A tenor del número de listas presentadas, el fenómeno del partido de Santiago Abascal que reflejan las encuestas a nivel nacional y autonómico tendrá efectos muy localizados para lograr representación en la futura corporación provincial. La amenaza más grande será el partido judicial de Alicante donde Vox ha presentado listas en los municipios grandes, además de en la capital. Y de acuerdo con los sondeos, es muy probable que Vox obtenga un acta en la composición del plenario de la Diputación. La amenaza más seria para el PP también está en que el voto del PSPV-PSOE se dispare o que Compromís se haga con el diputado de Villena merced a su coalición electoral con Los Verdes, que ahora gobiernan con mayoría absoluta.

En la actualidad, el PP preside la Diputación de Alicante gracias a sus 15 escaños frente a los 11 del PSPV-PSOE, tres de Compromís; uno de Guanyar (EU-Podem), y Ciudadanos, aunque su titular, Fernando Sepulcre, abandonó la formación y pasó a los no adscritos. Por primera vez en 20 años, no ha habido mayoría absoluta, algo que tampoco se prevé en el próximo mandato. De acuerdo con los resultados de 2015, el PP mantuvo la mayoría en los partidos judiciales de Benidorm (2), Orihuela (3), Alicante (3), Elche (3), Villena (1); empató a uno en Dénia y Alcoy, y perdió en Elda (1). El PSOE se impuso en Elda (2), empató en Dénia (1); logró dos en Elche Orihuela, y uno en Alcoy y Benidorm. Compromís logró su representación en Dénia, Alicante y Elche. Y Ciudadanos y Guanyar lograron un representante en L'Alacantí.

¿Donde se pueden producir los cambios ahora?

Hay partidos judiciales es los que es muy difícil que se mueva la actual composición. Por ejemplo, en Dénia se da por hecho el triple empate a un representante entre PSPV, PP y Compromís; en Alcoy, el empate entre PSPV y PP, a uno; en Elda y Benidorm seguirán, probablemente, las mayorías de PSPV en el Medio Vinalopó, y del PP en la Marina Baixa. En la Vega Baja tampoco se esperan sorpresas: se mantendrían los tres diputados del PP frente a los dos del PSPV. Vox se presentará en pocos municipios y el efecto de Ciudadanos está por ver en esta comarca.

Ante este panorama, los cambios se pueden producir en el resto de partidos judiciales; es decir, Alicante, Elche y Villena. En el primero (L'Alacantí), las expectativas electorales del PSOE podrían hacer que se hiciera con el diputado que hasta ahora tiene la coalición Podem-Esquerra Unida, con lo que podría sumar uno más fácilmente y llegar a los tres; podría darse la entrada de Vox, escaño que competiría con el PP y Ciudadanos en el aspecto ideológico, o dejar fuera al último, sea Compromís o el propio Ciudadanos, si caen sus resultados; en el segundo (Baix Vinalopó), es muy difícil que Vox entre, pues apenas presentará tres listas electorales en ese partido judicial, pero sí que podría hacerlo Ciudadanos y quitárselo al PP, o que el PSPV alcance el tercero en detrimento de otro partido. Y finalmente, está el único diputado de Villena, que puede seguir en manos del PP o caer del lado de Compromís-Los Verdes, si éstos repiten sus resultados en Villena y mejoran en el resto del partido judicial.

En estos momento, si se trasladan las expectativas electorales, el PP tendría tres diputados bailando: en Villena, frente a Compromís; en Elche, frente a PSPV o Cs y en Alicante, frente a Vox. Ciudadanos y Compromís también pueden tener problemas en retener el de Alicante frente a Vox o PSPV. Es muy difícil EU-Podem que lo mantenga. Ahora bien, una cosa son las expectativas de las elecciones generales y autonómicas, y otro muy diferente, las de las municipales.

Pero tan importante es es para el PP no perder escaños frente a otras fuerzas políticas, que el PSPV se dispare en feudos como Alcoy, el Vinalopó o en las ciudades del área metropolitana de Alicante, donde hay mucha fragmentación del centro-derecha. Ahí está la pelea.