El juego de las sillas

25/07/2018 - 

ALICANTE. Desde que reventó la burbuja de la construcción y el dinero volvió a escasear en las arcas de los clubes que penan por las catacumbas del fútbol español, a las que el maná de las televisiones no llega, aunque ya en el curso 2018/19 la Federación de Rubiales vaya a incrementar algo las modestas cantidades que tienen asignadas los equipos de Segunda B (algo que los nuestros -el Alcoyano, porque el Hércules no acudió- conocieron días atrás en una reunión con la Federación Valenciana), el juego del verano por excelencia es el de las sillas. Más concretamente, esta pretemporada el mercado de fichajes se mueve al paso que marcan el intercambio de cromos y las cartas de libertad, algo de lo que tampoco escapan algunos de los clubes que militando en el fútbol profesional se ven atenazados por las limitaciones presupuestarias que les impone para gasto en plantilla la Liga de Fútbol Profesional, como le está ocurriendo al Elche que hace doce meses competía en Segunda B y junto al Mallorca disparaba con pólvora del rey gracias al dinero de la ayuda del descenso, encareciendo con carácter general el mercado. 

Este martes el Hércules hacía oficial la contratación de Diego Benito, mediocentro organizador de 30 años que el curso pasado jugó precisamente en el club franjiverde hasta que este en el mercado de invierno decidió poner fin por adelantado a la vinculación contractual con el madrileño que en la segunda vuelta defendió la camiseta del Cartagena, sufriendo en sus carnes el duro palo que supuso para los departamentales no superar la eliminatoria de campeones y luego caer en la ronda final con el Extremadura.

Casi a la misma hora, por un lado empezaba a cobrar fuerza la decisión del Murcia de no contar finalmente con Leomar Pinto, jugador del mismo perfil que Diego Benito pero que ocupa ficha sub-23 y que el Elche había cedido la semana pasada al club pimentonero sobre el que, casualmente ahora, revolotean nuevos inversores y, por otro lado, el 'general manager' del Cartagena confirmaba en los micrófonos de Onda Regional de Murcia que otro pivote también del mismo corte, Alejandro Chavero, ha pedido la carta de libertad para jugar en un equipo del grupo III por motivos personales (su familia reside en Villarreal), especulándose desde el primer momento con que su destino podía ser el propio Hércules, algo que no  facilitaría precisamente que desde las oficinas del Cartagonova le dejen marchar sin obtener una compensación económica a cambio.

Rompecabezas

Todo y el fichaje de Diego Benito, en la la lista de tareas pendientes de Portillo y Planagumà aparece reforzar el centro del campo con un jugador más. El problema es que no es la única zona a apuntalar y que con la incorporación del mediocentro madrileño solo restan dos fichas profesionales libres y, de ser el elegido Chavero, una de ellas tendría que ser para él... Si no va a llegar finalmente un nueve experimentado y con gol (complicado porque la situación económica no permite grandes alardes y habría que rescindir contrato antes a David Torres o Carlos Fernández), la plaza sénior vacante sería para un lateral zurdo que compita con el sub-23 Nani y el puzle encajaría a la perfección. 

Elche

Pero es que por Foguerer Romeu Zarandieta también suenan los nombres de Collantes y especialmente Lolo Plá, a los que el Elche enseñó ayer la puerta, Jugadores de ataque pero por banda, de características que también interesan al Hércules a la hora de reforzar su delantera y que por su edad necesitarían una ficha profesional, como  también sería el caso  de Nando Quesada, pivote ofensivo de 24 años que se incorporó hace unas semanas al club franjiverde y  que este desea cederlo como a Leomar Pinto, que sí es sub-23 y parece que no jugará en la Nueva Condomina como local. 

Los citados movimientos responden a la necesidad del Elche de aligerar carga salarial para poder reforzarse con jugadores que le permitan afrontar con más garantías la competición en Segunda A.

Noticias relacionadas