El IBV desarrolla la tecnología 'Calorías' para determinar los efectos de un tratamiento estético en cada persona

VALÈNCIA.  Detectar lesiones o anomalías, mejorar el seguimiento de los pacientes o incluso determinar los efectos de un tratamiento estético o de un producto cosmético en función de la respuesta térmica de cada persona podrá ser posible gracias a la tecnología que el Instituto de Biomecánica (IBV) está desarrollando en el proyecto 'Calorías'.

El objetivo de este trabajo, financiado por la Generalitat y con fondos europeos Feder, es explorar y definir aplicaciones basadas en imágenes térmicas en las áreas estética, clínica y de bienestar. También busca unir esta información térmica que se obtiene a través de una imagen infrarroja con aplicaciones basadas en escáneres antropométricos, permitiendo integrar información de forma, postura, movimiento y temperatura.

Esta información completa del cuerpo humano permitirá a muchas empresas mejorar sus diseños y evaluaciones de productos, así como optimizar los procesos de diseño y personalización, resalta el director de innovación en Tecnología Sanitaria del IBV, Carlos Atienza.

Por ejemplo, las aplicaciones permitirán mejorar la detección y tratamiento de varias afecciones cutáneas o de varices y lesiones ligamentosas. También podrán evaluar los efectos de productos estéticos o cosméticos y de tratamientos rehabilitadores para mejorarlos, hasta comprobar si esa mejora es real.

Los avances en el campo térmico serán de utilidad en el sector de la automoción, donde el confort térmico de los ocupantes del vehículo es un reto en el que trabajan las empresas de componentes, aportando soluciones como paneles térmicos, asientos calefactables o personalización.