FOTO: Werner Wilmes ALTEA. El Ayuntamiento de Altea está dispuesto a darle un empujón al comercio de la localidad con ayuda de los empresarios y vecinos. De este modo, han presentado el Plan de Dinamización Comercial, que se ha nutrido de encuestas a turistas, mystery shopper, focus group con residentes y sesiones grupales con los empresarios, en el que abarcan también el sector de la restauración. Según explicó a Alicante Plaza la concejal de Comercio, Anna Alvado, el objetivo es recuperar la imagen de Altea como una zona comercial de la comarca diferenciada, con diferentes acciones que se llevarán a cabo en el medio y largo plazo.
Una de las más destacadas es ampliar el horario de los comercios en los meses de invierno. Según señaló la edil, se enmarca también dentro de la estrategia para desestacionalizar el turismo en Altea, por lo que jugará un papel importante el nivel de demanda que perciban los empresarios. Así, quieren que siga "teniendo vida" en invierno, pero siempre buscando un equilibrio.
Otra de las iniciativas que se tratarán de introducir en el comercio de Altea es la contratación de un repartidor a domicilio. Tal y como indicó Alvado, sería una sola empresa la encargada de todo el municipio, tanto para tiendas como para bares y restaurantes.
Además, Alvado explicó que quieren reivindicar la cultura también en este ámbito, por lo que harán acciones relacionadas con el arte, como exposiciones y eventos en las calles.
Entre otras cosas, también han incluido un programa de emprendimiento, dayketing (por ejemplo: el día de las zapaterías) o shopping night (noche en la que las tiendas se quedan abiertas durante más tiempo y amenizada con eventos por la calle).
En cuanto a los resultados de la opinión de todas las partes, la edil dice haber encontrado dos posiciones distintas, en las que los empresarios están más satisfechos con los comercios que los clientes, que son más exigentes. Estos últimos han apuntado como uno de los aspectos negativos la formación de los trabajadores.
Por último, uno de los datos que reveló la concejal es la percepción en Altea de la competencia con los municipios de alrededor, sobre todo con Benidorm, con la que dijo no "poder luchar", pero indicó que la intención es tener su propia imagen, en la que predomine la calidad, pero con un precio justo porque apuntó: "Altea no es cara".
