ALICANTE. El fundador de la empresa alicantina de digitalización de procesos Iristrace, César Mariel, ha comenzado a darle forma de grupo a su entramado empresarial. Iristrace estaba dividida en dos sociedades, una con sede en Ámsterdam y otra, la española, domiciliada en Ibi, donde está la mayor parte de su actividad industrial. Mariel era, hasta ahora, el propietario del capital de ambas firmas, pero según recoge el Boletín Oficial del Registro Mercantil ha decidido convertir a la sociedad holandesa en cabecera de la española.
De esta forma, Iristrace BV, domiciliada en los Países Bajos, se ha convertido en socio único de Iristrace Iberia SL, según recoge la inscripción en el registro. La existencia de las dos firmas se explica porque Mariel, pese a que 'creó' la empresa en Ibi, le dio forma jurídica durante su estancia en Ámsterdam, tras participar con su idea en la Startupbootcamp de 2014 en dicha ciudad. Su startup resultó elegida entre los finalistas y fue acelerada en los Países Bajos durante parte de ese año.
La empresa ibense ha desarrollado un software que permite a las empresas digitalizar la mayoría de procesos que se realizan en el día a día. Entre sus clientes se cuentan hoteles, retail o industrias, para los que ofrecen digitalizar controles de calidad, partes, revisiones, auditorías... El germen de la empresa está en el iWeekend celebrado en València en 2010, a donde su fundador llegó con una app que analizaba los puntos de control críticos de los planes de seguridad de la administración pública. Un cambio legislativo derrumbó la idea y lo llevó a reenfocar su propuesta.
Aunque en la actualidad la mayoría de su negocio se encuentra en el sector turístico, la firma ibense obtuvo un plus de notoriedad cuando, en diciembre de 2018, fue seleccionada por Microsoft y la Real Sociedad para digitalizar el estadio de Anoeta. La compañía propuso al club donostiarra un sistema para el análisis de datos en tiempo real en múltiples parcelas de gestión que permite extraer conclusiones para actuar con rapidez ante posibles incidencias. Entre otros aspectos, todo lo relacionado con el mantenimiento de las infraestructuras, el cumplimiento de la legislación de eventos deportivos, los niveles de seguridad o el control de las obras.
Constituida en España en 2016, Iristrace tiene su sede técnica en la avenida Juan Carlos I de Ibi, donde trabajan una veintena de personas dedicadas sobre todo al desarrollo del software. En 2018, último año del que se han presentado cuentas, la empresa facturó cerca de 800.000 euros, el doble que un año antes. Su 'fichaje' por la Real Sociedad en 2019, además, ha abierto a Mariel un enorme campo de acción en el sector deportivo, donde ya negocia con otros posibles clientes para implementar la misma solución que en San Sebastián.