ALICANTE. El Elche ha cerrado la primera mitad de la Liga muy por debajo de las expectativas creadas al principio del curso, más allá de la clasificación exacta que va a ocupar al final de la jornada con la que se llega al ecuador del campeonato, bien muy cerca del descenso o bien en una de esas posiciones.
El conjunto ilicitano, que ha relevado a su anterior entrenador, Fran Escribá por Francisco Rodríguez, finaliza el primer giro del campeonato con dieciséis puntos, uno menos de los que logró el pasado curso, en el que se salvó de forma casi milagrosa en la última jornada.
El Elche ha ganado los mismos partidos que la pasada temporada a estas mismas alturas (tres), pero ha perdido más (nueve) y empatado menos (siete).
La sensación que deja el equipo es que ha merecido más puntos, pero errores individuales en momentos clave de varios partidos y algunas decisiones arbitrales que considera le han perjudicado, le han impedido ocupar una posición más desahogada.
El rendimiento del equipo, que ha mejorado ligeramente las sensaciones tras el relevo en el banquillo, está por debajo de lo esperado, ya que el objetivo del club era lograr una permanencia mucho más holgada que la del pasado ejercicio.
Para lograr el objetivo, el club contrató a jugadores con experiencia en Primera, como Pedro Bigas o Lucas Pérez, además de reforzarse con futbolistas de prestigio internacional, como los argentinos Javier Pastore y Darío Benedetto o el español Omar Mascarell.
El Elche arrancó el curso de forma esperanzadora con dos empates como local ante Athletic y Sevilla y una victoria en Getafe (0-1) en las primeras cuatro jornadas. Posteriormente, varios errores puntuales defensivos acabaron por costarle puntos, como ante el Levante (1-1), Villarreal (4-1) y Real Sociedad (1-0).
Tras ganar al Celta (1-0), el Elche entró en una dinámica negativa que le tuvo seis jornadas consecutivas sin ganar y en la que dejó escapar la opción de sumar triunfos ante rivales directos como Alavés (1-0) o Real Mallorca (2-2).
Una contundente derrota ante el Betis (0-3) hundió al Elche en la zona de descenso y le costó el cargo a Escribá, mito de la afición, quien había logrado un ascenso y tres permanencias en Primera en sus anteriores etapas.
La llegada de Francisco se transformó en una clara victoria ante el Cádiz (3-1) y en una buena imagen en Valencia (2-1) y Barcelona (3-2) en encuentros salpicados de polémica arbitral y en los que dejó buenas sensaciones, pero fue incapaz de sumar.
El Elche cerró la primera vuelta con un empate ante el Granada (0-0) en un partido en el que mereció más y en el que la expulsión nada más comenzar la segunda parte de un jugador le obligó a dar por bueno la igualada.
"Tenemos que mejorar. Hay que hacer una gran segunda vuelta para conseguir el objetivo", señaló el técnico como balance de la primera vuelta.
El entrenador almeriense no quiso marcarse una cifra de puntos para llegar a la permanencia, ya que prefiere enfocar únicamente en el próximo partido, ante el Espanyol, en el que el Elche intentará romper su mala racha e iniciar la travesía hacia la salvación.
