ALICANTE. El nuevo edificio del Distrito Digital en el puerto de Alicante, proyectado en el muelle 5 a espaldas del centro comercial Panoramis, va camino de enredarse en la polémica. Uno de los estudios de arquitectos cuya propuesta para diseñar la subsede fue rechazada por la Sociedad Proyectos Temáticos por considerar que incumplía la normativa portuaria, Grupo Aranea y Subarquitectura (autor del proyecto del paseo litoral), acudirá al Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales (TARC) del Ministerio de Hacienda para que anule la resolución que los descalifica y valida como única oferta la del estudio valenciano Amix.
El recurso de los arquitectos alicantinos se basa en que, a su juicio, su propuesta no incumple la normativa portuaria, como resolvió el comité de expertos nombrado por SPTCV para evaluar las propuestas (una resolución que se adoptó por unanimidad de los tres miembros del comité), y que en todo caso, si ese fuera el motivo de la descalificación, la propuesta de Amix también debería haberse rechazado. Pero además, el estudio hace suyas las dudas expresadas por el Colegio de Arquitectos de Alicante, representado en el comité por su vicepresidente, sobre la circunstancia de que la única oferta validada por el comité sea la de la empresa que ya realizó el estudio previo sobre el muelle 5.
Como adelantó Alicante Plaza el viernes, la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana (SPTCV) prevé adjudicar la redacción del proyecto de la nueva sede del Distrito Digital a la misma empresa que se encargó de redactar el estudio previo, que determinaba las características que debería cumplir este inmueble. Ahora los trámites solo están pendientes de que se abra la propuesta económica de la empresa, que es la única que queda de las tres que se presentaron, y si todo está en orden será la adjudicataria. La sociedad pública defiende el procedimiento en base a informes técnicos externos, que avalarían la adjudicación al estudio valenciano.
"Los informes jurídicos externos y la aplicación de la normativa vigente han dictaminado que en ningún caso se ha vulnerado la libre competencia ni se ha creado ventaja competitiva para el resto de los licitadores, ya que todo el anteproyecto estaba a disposición de los aspirantes en el propio pliego de condiciones desde el mismo día de publicación de la oferta", defendía Proyectos Temáticos en un comunicado el pasado viernes. A lo que Grupo Aranea replica que "se ciernen las dudas sobre la elección del nuevo edificio para el Distrito Digital".
"La presentación por parte de SPTCV de las imágenes del proyecto de Amix para para la nueva sede del Distrito Digital antes de la convocatoria del concurso hizo saltar las primeras alarmas", explican, y "cuando por fin se convocó el concurso, se hizo en base al proyecto de Amix (todos los planos con su cajetín identificador aparecen en las bases del concurso), lo que nos pareció todavía más sospechoso". También cuestionan que "se estableció un plazo de entrega de diecisiete días, impropio para el diseño de un edificio de esta envergadura". Una queja del Colegio de Arquitectos, eso sí, motivó que SPTCV ampliase el plazo.
El motivo de la descalificación del proyecto conjunto de Aranea y Subarquitectura es la normativa del Plan Especial del Puerto de Alicante, que limita la dimensión de las fachadas. Los técnicos interpretaron que el edificio propuesto por los autores del paseo litoral es un único inmueble, lo que vulnera dicha normativa. "Pensamos que no está justificada la descalificación, puesto que se trata de una mala interpretación de nuestro proyecto", replican. "No se ha tenido en cuenta que está formado por diferentes módulos conectados únicamente por una serie de pérgolas, donde están los espacios abiertos de comunicación vertical; el proyecto se plantea como un sistema compuesto por una serie de módulos que pueden intercambiarse y adaptarse"
En cualquier caso, Aranea y Subarquitectura defienden que "si analizamos la propuesta de Amix, nos daremos cuenta que también presenta una estructura superior continua a modo de ola que unifica los diferentes edificios, y este hecho no ha supuesto motivo para la descalificación de su propuesta". Tampoco lo ha sido, critican, "la disposición de una especie de faro/aerogenerador que excede por mucho la altura máxima permitida. Lo que demuestra que las normativas están sujetas a cierta interpretación y necesitan de aclaraciones y discusiones", argumentan.
Los arquitectos han solicitado una reunión con los técnicos que valoraron las propuestas para explicar de nuevo su proyecto, pero en paralelo han decidido acudir al Tribunal del Ministerio de Hacienda para pedirle que anule la resolución que los descalifica.