ALICANTE. Los comercios de Alicante siguen contando los días para la llegada de la Fase Uno del desconfinamiento en la provincia en próximo lunes, que se da por descontada, y su reapertura con limitaciones de aforo y estrictas medidas de seguridad. Muchos están deseando abrir porque necesitan generar ingresos de forma urgente tras dos meses cerrados, pero también son muchos lo que dudan sobre la viabilidad de reabrir en las condiciones que se exigen.
Esta semana, como ya adelantó Alicante Plaza el martes, se ha dedicado a aprovisionarse e instalar elementos de seguridad para la reapertura del lunes. Una tarea que no está siendo fácil, según explican desde la federación de comerciantes Facpyme, la más representativa de la provincia con 10.000 comercios de la provincia asociados. La compra de hidrogeles a granel se ha canalizado a través de una empresa de Santa Pola, y en cuanto a las pantallas de protección que incluye la guía, muchos comercios han decidido recurrir a vinilos.
En este sentido, el empresario y editor José Antonio López Vizcaíno, de Grupo ECU, ha diseñado un vinilo que se coloca en el techo para proteger los mostradores de los comercios, ante las dificultades para conseguir mamparas de metacrilato a medida para cada local y con tan poco tiempo. Muchos asociados de Facpyme, según confirman las mismas fuentes, están recurriendo a este sistema, que está contemplado en la guía de seguridad editada por la Conselleria. "Se trata de que haya un elemento que separe al comerciante de los clientes".
Más allá de las medidas de seguridad, la principal preocupación de los comerciantes de la provincia es la rentabilidad de una apertura condicionada no solo por las restricciones de aforo, sino también de movilidad. Muchos comerciantes, según Facpyme, se están planteando abrir solo medio día, o en el caso de tener varios puntos de venta, abrir solo uno de ellos. "No tiene sentido abrir todo el día cuando las franjas horarias limitan el momento del día en el que puedes ir a comprar", explican.
Un problema que es especialmente notable en el caso de la hostelería, donde la posibilidad de servir comida para llevar no ha tenido mucho éxito, como ha contado también este periódico. "Con el aforo al 50% y dos metros de separación entre los clientes, muchos no pueden cumplir con estas condiciones en sus terrazas", explican desde la federación de comerciantes, por lo que "esperarán a que avancen las fases del desconfinamiento para plantearse volver al negocio".
Eso sí, muchos de los comerciantes están deseando reabrir porque "necesitan generar ingresos ya". La intención es "ir progresivamente buscando la normalidad, pero siempre que la apertura sea rentable". De esta forma, la federación provincial de pequeños comerciantes considera que el próximo lunes "abrirá la mayoría, pero con una reducción de jornada y solo los que hayan logrado garantizar las medidas de seguridad e higiene".