ALICANTE. El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, un bipartito en situación de minoría compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), impulsará la planificación de un centro de congresos para la ciudad en un punto todavía por concretar próximo al borde litoral de la ciudad e impulsará los trabajos para la redacción de las bases del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el denominado Plan General Estructural. Esos han sido los dos principales compromisos adquiridos por el alcalde, el popular Luis Barcala, y por la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez (Ciudadanos), en el transcurso del Debate sobre el estado de la ciudad celebrado este martes, en una sesión que se ha visto marcada por los reproches recíprocos entre los seis partidos representados en la corporación municipal: PP, PSPV-PSOE, Cs, Unides Podem EU, Compromís y Vox.
Los dos principales compromisos se han conocido durante las intervenciones finales de Barcala y Sánchez. En primer término, la vicealcaldesa y edil de Turismo ha deslizado que Alicante continúa requiriendo de una infraestructura que permita seguir potenciando la ciudad como destino de congresos, al margen de las prestaciones que ya ofrecen otras instalaciones privadas o públicas como el centro del Colegio de Médicos o el Auditorio Provincial de Alicante (Adda). Además, ha confirmado que ya se estaba trabajando en la liquidación del contrato suscrito para la redacción del PGOU impulsado por el PP de Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo, todavía pendiente, para que se pueda iniciar la contratación del trabajo de asesoría externa que resulta necesario para la elaboración de ese Plan General Estructural, en sustitución del planeamiento vigente, aprobado en 1987.
Y en esa línea ha incidido también el primer edil, durante el discurso con el que se ha dado cierre al debate. Barcala ha ampliado los detalles sobre esas dos propuestas centrales al señalar que se planificará la ubicación del centro de congresos en algún punto todavía por definir del tramo sur del "eje litoral": uno de los tres ejes en los que, según ha señalado, se centraría el desarrollo de Alicante en el periodo 2020-2030. Según Barcala, dicho eje litoral comprendería los 21 kilómetros del frente litoral de la ciudad, con especial mención a la avenida de Villajoyosa, el barrio de Sangueta, el Puerto, las instalaciones de Ciudad de la Luz, en la actualidad, sede del Distrito Digital, y la EUIPO.
El Ayuntamiento de Alicante ya proyectó la construcción de un Palacio de Congresos en terrenos del barrio de Sangueta bajo la etapa de gobierno del popular Luis Díaz Alperi que no llegó a construirse ni bajo el mandato posterior de Sonia Castedo, ni a partir de 2015, tras el desestimiento de la Generalitat y del nuevo equipo de Gobierno compuesto por PSOE, Guanyar y Compromís, que lo consideraron inviable por su alto coste. Con todo, el proyecto ha vuelto a plantearse con posterioridad en varias ocasiones. La última de ellas, en plena campaña electoral de las municipales de mayo, cuando el PSPV-PSOE propuso regenerar todo el frente litoral soterrando el tráfico desde Plaza de Galicia hasta la intersección con la Avenida de Dénia y construir un centro de congresos de nuevo en terrenos de Sangueta.
El segundo de los gres grandes ejes citados por Barcala, sería el central, que comprendería el desarrollo de los barrios comprendidos en el ámbito de la Estrategia de Desarrollo Sostenible Integrado (EDUSI) Las Cigarreras y el futuro Parque Central en los terrenos liberados de las vías, con fecha de inicio en el año 2024. En esta línea, ha confirmado que se llevará acabo un proyecto provisional de interconexión para los barrios hasta ahora separados por el ferrocarril.
Y en tercer lugar figuraría el eje interior, que comprendería desde la renovación urbanística de Rabasa, al desarrollo de los 850.000 metros cuadrados del Parque Científico de la Universidad de Alicante (UA) y el desarrollo del cinturón industrial con un plan de inversiones para convertirlos en ciudades empresariales dotadas de zonas verdes y servicios.
Respecto a la redacción del Plan General Estructural, ha apuntado que, a través de ese documento, se canalizará la planificación del modelo de ciudad con el que trabaja el bipartito, en el que se pretende potenciar la generación de suelo industrial y fomentar la instalación de empresas ligadas al emprendimiento y a la nueva economía digital, en el marco de la iniciativa Alicante Futura, "de modo que se aprovechen las posibilidades del Distrito Digital y del centro europeo de investigación en Inteligencia Artificial".
El primer edil también ha incidido en su intervención en la necesidad de reivindicar inversiones a administraciones superiores como la Generalitat y el Gobierno Central y ha conminado al resto de grupos políticos a apoyar esa exigencia frente a los gobiernos que dirigen esas instituciones. "No pedimos más que lo que nos corresponde; no podemos permitir que se reproduzca el agravio de Madrid respecto a la Comunidad, también desde la Comunidad hacia Alicante", ha recalcado.
Como era de preveer, el desarrollo del debate ha estado marcado por el desigual balance ofrecido por el bipartito y por los grupos de la oposición respecto a lo acontecido a en Alicante a lo largo del último año. Las portavoces de PP y de Cs, Mari Carmen de España y Mari Carmen Sánchez respectivamente, han defendido la estabilidad del acuerdo de gobierno y la recuperación de la normalidad institucional, frente a los tres años precedentes de mandato del tripartito. Las dos han incidido en la puesta en marcha de proyectos que permanecían atascados y han defendido que "Alicante avanza en la buena dirección", aunque han admitido que todavía queda "mucho camino por recorrer".
Las dos -y en especial De España- han contrapuesto esa nueva situación a la generada bajo el mandato de PSOE, Guanyar y Compromís, de la que han recordado episodios especialmente polémicos como el de los encargos concedidos a Escola Valenciana con motivo de la organización de la Plaça del Llibre o el denominado caso Comercio, que provocó la dimisión del exalcalde socialista Gabriel Echávarri, y su posterior condena, como ha subrayado De España.
Los portavoces de los grupos de la oposición, por su parte, han criticado la inacción que, a su juicio, ha primado durante el primer tramo del año en curso, bajo el mandato del PP, y, ahora, del bipartito que conforman junto a Cs. Los ediles Paco Sanguino (PSPV-PSOE), Xavier López (Unides Podem EU) y Natxo Bellido (Compromís) han argumentado que el alcalde carece de "credibilidad" puesto que, en su opinión, se limita a "formular anuncios" que después no llegan a ejecutarse.
En esta línea, los tres han incidido en que ni en este medio año de bipartito, ni en los 20 meses en los que Barcala ha asumido la Alcaldía "no se ha hecho absolutamente nada por mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos" en aspectos como la promoción del empleo, el acceso a la vivienda, o la mejora en la prestación de los servicios públicos. También le han recriminado que no se haya dado ningún paso hasta ahora para iniciar la redacción del nuevo PGOU pese a que en campaña todos los grupos políticos habían coincidido en que debía ser una prioridad.
Al mismo tiempo, los tres partidos del eje progresista han destacado la existencia de discrepancias internas en el equipo de Gobierno en asuntos como la interposición del recurso frente a la sentencia que condena al Ayuntamiento a acordar una Zona Acústica Saturada (ZAS) en las calles del Centro Tradicional, por ejemplo. En la misma línea, también han incidido en lo que han considerado falta de participación de Cs en la gestión municipal.
Por su parte, el portavoz de Vox, Mario Ortolá, ha conminado al bipartito a mejorar la atención a los barrios y a las partidas rurales y ha emplazado a PP y Cs a no seguir "la dictadura de la ideología de la izquierda".