ALCOY (EFE). El Alcoyano afronta con lo justo por las bajas el duelo provincial del domingo frente al Hércules en el Rico Pérez, al unirse dos nuevas bajas al amplio listado de ausencias con el que contó en la última jornada ante el Valencia Mestalla, que obligó al técnico Vicente Parras a llamar hasta siete jugadores del juvenil de Liga Nacional para completar la convocatoria.
Esta semana se han sumado esta semana el delantero Jona Mejía por la cláusula del miedo y el centrocampista Ramón López al cumplir ciclo de tarjetas.
La única buena noticia para Parras es el alta del central Raúl González que regresará al once tras cumplir en la Ciudad Deportiva Antonio Puchades sanción por acumulación de amonestaciones.
El técnico del Alcoyano está pendiente de la evolución del estado de los lesionados Pablo Carbonell, Manuel Raíllo y Juli Cerdá, tres futbolistas en teoría titulares pero que aún no se han estrenado en lo que llevamos de año y en algún caso suman más de un mes de baja.
Es especialmente significativo el caso del hispano-hondureño Jona Mejía, uno de los fichajes estrella del Alcoyano en su regreso a la Segunda B, que ya en el encuentro de la primera vuelta se quedó fuera del equipo por la denominada cláusula del miedo.
En el contrato del delantero tras rescindir el pasado verano con el Hércules no figura esta cláusula, si bien existe un pacto entre clubes por el cual si el Alcoyano decide alinear al jugador deberá pagar una cantidad de dinero.
Este encuentro de rivalidad provincial llega en el mejor momento de la temporada de los de Vicente Parras, quienes tras las dudas del inicio de liga, llevan un mes y medio pletórico con siete partidos sin perder -cinco ligueros y dos coperos- que incluyen las eliminatorias de Copa frente al Laredo y Huesca, que han posicionado al Alcoyano en tercera posición, inmediatamente por detrás del Hércules, con lo que quien gane además de dar un golpe de efecto anímico también se llevará el cómputo particular.