tomás y el otro edil de eupv pasan a ser no adscritos

El alcalde de Muro deja Esquerra Unida ante la "incomodidad" por el pacto con PP y Cs

1/07/2019 - 

ALICANTE (EP). El alcalde de Muro d'Alcoi, Gabriel Tomás, ha renunciado "amistosamente" a su vinculación con Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) y junto a su compañero y concejal de la corporación, Kike Pascual, se han dado de baja de la afiliación ante la "incomodidad y contradicciones estatutarias" que supone haber aceptado el respaldo de PP y Ciudadanos para acceder a la Alcaldía En un comunicado, ambos han detallado que pasan a ser concejales no adscritos para poder canalizar el programa de gobierno y el trabajo a realizar.

En ese sentido, han anunciado la creación de una plataforma ciudadana desde la que plasmar "de una manera más transversal y plural los anhelos y deseos" de los vecinos "sin las ataduras ni estorbos de los partidos generalistas", a los que han acusado en "muchísimas ocasiones" ser desconocedores "de las realidades locales". No obstante, han apostado por un "talante progresista e inclusivo" donde se priorice "siempre" el bienestar de los conciudadanos "respecto de los condicionamientos impuestos por cúpulas foráneas".

"Es el momento de municipalismo, de crear sinergias para hacer pueblo, de unir fuerzas para lograr objetivos comunes, es el momento entenderse y trabajar para lograr una sociedad mejor", han argumentado. Tomás y Pascual han explicado que la problemática surgió tras los comicios locales de mayo, cuando se inician los contactos de todas las fuerzas políticas con el fin de formar gobierno. Según han explicado, esas conversaciones no fructificaron "en un hipotético gobierno estable" dado "el fraccionamiento y las líneas rojas" de los partidos.


Ante ello, la asamblea local de Esquerra Unida decidió votar a su alcaldable, Gabriel Tomás, ante la imposibilidad de un acuerdo y descartar el apoyo a la fuerza más votada (Compromís) por entender que apoyar esta fuerza "es perjudicial para el tipo de políticas progresistas y de avance social" que EUPV quería desarrollar. Y es que la relación con Compromís se rompió hace dos años cuando, tras traspasarles la vara de mando --tal y como se pactó en 2015-- se expulsó a los ediles de EUPV de una manera "despótica, inhumana y carente de unos mínimos valores éticos", "sin ninguna reunión previa" y con una "simple y gélida llamada de teléfono".

La sorpresa fue que Tomás recibió el respaldo de PP y de Ciudadanos y se hizo con la Alcaldía. El nuevo alcalde hizo una llamada a un gobierno de concentración para "dejar de un lado las siglas" y "trabajar" por Muro. Un llamamiento, que según Tomás y Pascual, solo han asumido "las dos fuerzas políticas que dieron su apoyo" el día de la investidura: "Y es desde entonces donde comienza el trabajo para dar forma a un nuevo y transversal equipo de Gobierno, eso sí, siempre abiertos a un último cambio de postura por parte de las fuerzas políticas restantes para su incorporación".

Los dos exediles de EUPV se han comprometido a defender "los valores" por los que se presentaron y que se ven "con fuerza para encabezar un gobierno de cambio, un gobierno donde están los que han querido estar, dando siempre la cara y sin renunciar a la responsabilidad de trabajar por nuestro pueblo".

"Ante el condicionamiento ideológico, hemos apostado por priorizar el trabajo municipalista, frente al sectarismo y las decisiones piramidales no surgidas de los colectivos locales, apostamos por solucionar los problemas de los vecinos de Muro, ante la coherencia disfrazada de imposición, apostamos por luchar para hacer un pueblo mejor, donde el trabajo, el esfuerzo colectivo y un programa común nos garanticen la creación de un espacio de convivencia mejor", han zanjado.