El agua regenerada, el objetivo para buscar alternativas en el abastecimiento de agua

BENIDORM. El centro Dinapsis Costa Blanca cumple siete años. Un proyecto creado por Hidraqua en Benidorm que se materializó en 2017 y cuyo modelo se ha ido replicando en otras ciudades como Madrid o Málaga, aunque con otros objetivos. En este tiempo, y en colaboración con administraciones locales y empresas externas, han lanzado más de 30 proyectos y sigue estudiando fórmulas para ser más eficientes en materia hídrica. Un asunto de relevancia en un momento en el que los recursos en la comarca de la Marina Baixa están en niveles bajos.

Para conmemorar este aniversario y debatir sobre la situación actual, Alicante Plaza junto a Dinapsis han celebrado un encuentro en las instalaciones de Benidorm. El foro, moderado por el director del diario provincial, Miquel González, contó con las intervenciones del gerente de Hidraqua en la Marina Alta y Marina Baixa, Ciriaco Clemente; la directora general del Agua de la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Sabina-Goretti Galindo; el concejal de Ciclo del Agua del Ayuntamiento de Benidorm, José Ramón González de Zárate; el profesor de Territorio, Transporte y Medio Ambiente del Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Alicante, Armando Ortuño; y la secretaria general de la patronal hotelera Hosbec, Mayte García. 

Como se decía, la comarca de la Marina Baixa ha entrado en "emergencia" por escasez hídrica esta misma semana, tras la última actualización de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Sin embargo, el abastecimiento está garantizado y ninguno de los municipios se verá afectado en cuanto a restricciones, más allá de las adoptadas por el Ayuntamiento de Altea en la zona de La Mallà, el Mascarat, Alhama Candela y Sierra de Altea dos. 

González de Zárate introdujo una de las alternativas por las que están apostando y que calificó de 'reto' para esta legislatura: redactar un plan de ordenación de toda la ciudad para el uso de agua regenerada. En este sentido, el edil explicó que Benidorm dispone de una depuradora y se sirven de este agua para baldear las calles y regar los jardines públicos. "Es una ciudad compacta", continuó en su intervención, reseñando la importancia de introducir este recurso en los jardines privados, tanto de hoteles, como de edificios residenciales y turísticos. Pero también hacerlo extensivo a los regantes de toda la comarca, sabiendo que los de Benidorm y l'Alfàs ya lo usan para sus cultivos, y por tanto se tendrían que incorporar Polop y La Nucía. Entre las ventajas que esgrimió, indicó que además de que es más barato para el ciudadano, el municipio conserva ese agua limpia para otro destino.  

Con esta solución, se podría ahorrar un 30% de agua potable, según los datos aportados por el regidor. Para tener esta capacidad, explicó que necesitan invertir en la EDAR de Benidorm cambiando las membranas actuales de la planta de tratamiento terciario. Un asunto que trataron minutos más tarde en el Comité de Seguimiento de Sequía municipal.

El guante lo recogió Sabina-Goretti Galindo, que explicó que desde su institución están lanzando proyectos "ambiciosos" de 'Vertido Cero' y explicó que van a movilizar 60 millones de euros desde la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) para trabajos destinados a mejorar los sistemas de reutilización de agua. Además, reivindicó las obras de Rincón de León y de Monte Orgegia con los que podrían poner a disposición del sistema 30 hectómetros cúbicos al año. "Son proyectos cuantiosos pero que a esta tierra le produce un gran beneficio", comentó al tiempo que manifestó las dificultades para ponerlo en marcha argumentando falta de respuesta del gobierno central.

A continuación, explicó uno de los problemas que han detectado en la reutilización del agua: cómo abordar la acumulación del recurso hídrico limpio. Así, manifestó que en ocasiones el punto de vertido no va a una balsa que luego se pueda almacenar o que a veces esa reutilización no puede ser del 100% por problemas con el destinatario final porque, o no la quieren porque prefieren otros recursos, o porque están dispuestos a aceptarla solo de manera temporal. Por ello dudó que sea la solución porque se necesita una gran inversión para una infraestructura cuyo uso sería "excepcional".

No obstante, informó que está trabajando con la CHJ y la Conselleria de Agricultura para algunas zonas. En este punto, introdujo otro "reto": llegar a la calidad del agua que obliga ahora la última directiva europea aprobada. De esta forma, la directora general del Agua confesó que le "quitaba el sueño" tener que cumplir con todo ello en "muy poco tiempo" y con "una gran inversión".

Y dentro de esta situación compleja por la escasez de agua en la zona, González de Zárate reseñó que la ciudadanía de Benidorm está cada vez más concienciada sobre la importancia de su uso moderado. Tal y como expuso Armando Ortuño, desde el 1997 hasta el 2019, año previo a la pandemia, el consumo del agua se redujo un 15% a pesar de dos circunstancias: el incremento de población residente de unos 50.000 habitantes a 72.000 y de turistas, y la subida de un 20% de las pernoctaciones hoteleras. "Esto ya no es modelo, esto es gestión", apostilló. En este sentido, también recordó que Benidorm cuenta con un rendimiento técnico de su sistema donde el porcentaje de fugas es inferior al 5% desde hace más de 10 años, lo que la sitúa entre las tres mejores del mundo, codeándose con Ámsterdam y Singapur.

Para el análisis de estos datos, Benidorm sigue avanzando en nuevos proyectos. A modo de ejemplo, el edil del área reseñó la incorporación de más puntos de muestreo para la monitorización en tiempo real de la red de agua potable, mientras que también han introducido la telelectura de contadores en la práctica totalidad de los edificios que así lo permiten. Esta actuación, en colaboración con Dinapsis, proporciona una herramienta a los vecinos para conocer a través de mensajes de móvil cuándo sobrepasan un consumo determinado y detectar fugas interiores en las viviendas.

Referente

Para Ciriaco Clemente, Benidorm es un referente en la gestión del agua y motivo por el cual otros municipios deberían de copiar el modelo. Además, explicó su importancia dado que cada acción de la ciudad, repercute en el resto de poblaciones de la comarca. En este sentido, considera que la ciudad tiene un reto, que es "mantener los niveles de eficiencia" actuales, lo que "requiere inversión y digitalización" y garantizar más recursos con la reutilización y como complemento, la desalación. Por último, como cuarto objetivo mencionó la disminución de la huella hídrica, en el que apeló al sector privado y reconoció que los hoteleros "no son parte del problema, sino del éxito".

Por su parte, Mayte García manifestó que los clientes están cada vez más sensibilizados con la gestión que hacen los alojamientos en cuanto al ahorro de agua. Así, lamentó que el sector turístico se "vea tradicionalmente como un devorador de recursos y que utiliza el hídrico de manera desproporcionada" y continuó: "Al final somos los primeros interesados en no consumir más agua de la estrictamente necesaria". La representante de los hoteleros reconoció que uno de los principales empeños es demostrar e identificar con datos que eso no es así. 

De este modo, explicó que mientras en Cataluña se imponían este invierno restricciones al llenado de piscinas, también en alojamientos turísticos, ellos analizaban las repercusiones y las motivaciones de hacerlo en la zona. "Vamos a ver qué efecto tiene sobre una economía que afecta directamente a la sociedad. Si cerramos las piscinas de los hoteles, es como cerrar el grifo en una planta textil, no se puede trabajar. Es un elemento clave, no de lujo", dijo García reseñando que la gestión del recurso en el sector es "óptima".

García relató que los hoteles ya está invirtiendo en infraestructura que permita un ahorro de agua, incluyendo incluso medidas habitación por habitación con sistemas de monitorización y de control. 

Fondos europeos

Para el desarrollo de estrategias y soluciones en esta materia, los Fondos Next Generation generaron otro de los debates en la mesa. Ciriaco Clemente explicó que se destinaron mil millones de euros para digitalizar redes de abastecimiento, no para obras. "Sí que es cierto que tienen unos recorridos muy dilatados, unos plazos de ejecución, mucha burocracia, mucha documentación...", lamentó el experto refiriéndose también a los plazos acotados "muy cortos" para ejecutarlos. 

Por su parte, la directora general del Agua de la Conselleria de Medio Ambiente considera que los fondos europeos son "una gran oportunidad", pero "si va de la mano de prestación técnica". Sabina-Goretti Galindo manifestó los problemas que están teniendo los municipios más pequeños para ponerlos en marcha, como puede ser el pago del IVA que descuadran las cuentas municipales, o por la falta de personal. "Es una pena tener el dinero y no poder gastarlo", apostilló. De este modo, recordó que desde Conselleria van a ampliar las subvenciones para ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes para proyectos de digitalización en el suministro con otros tres millones de euros que se suman a los 3,8 millones de euros de 2023. 

Una de las soluciones por las que han optado en la comarca ha sido asociarse varios municipios de menor envergadura con las grandes urbes. Para ello, González de Zárate mencionó el proyecto 'Vida Marina Baixa', donde se han unido Benidorm, la Vila Joiosa, l'Alfàs del Pi, Finestrat, Polop y Orxeta. En su conjunto, optan a 7,3 millones de euros del Pan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PERTE), y la responsable del mismo es Dinapsis. A su vez, el popular recriminó al gobierno central que el agua "no haya sido una prioridad" para introducirlo en los fondos europeos. 

Finalmente, el edil dijo estar dispuesto a que el Ayuntamiento invierta en la puesta en marcha de la desaladora de la ciudad. González de Zárate mencionó que en un primer momento la CHJ la rechazó,  y tras la alegación del Consistorio donde se comprometía a costearla con las arcas municipales, les dieron el visto bueno. Sin embargo, denunció impedimentos para completar todo el proceso burocrático con la entidad estatal. "La Epsar no tiene problema de dinero, es falta de personal", continuó la responsable de esta entidad autonómica, que reseñó que están estudiando cómo actuar en las zonas que más lo necesitan en cuanto a infraestructuras de desalación.