SANTA POLA. Los grupos ecologistas representados en la Junta Rectora del Parque Natural de las Salinas de Santa Pola consideran grave el creciente deterioro ambiental causado por el vertido de residuos en el entorno de la N-332 a su paso por este espacio natural y denuncian que desde hace años está habiendo un constante aumento de basuras que está provocando una "preocupante degradación", denuncian en un comunicado Ahsa y Talaiola Ecologistas en Acción.
En la última reunión de este órgano, celebrada el pasado mes de marzo, el representante de los grupos ecologistas volvió a pedir a la Consellería de Transición Ecológica que negocie con el Ministerio de Fomento el establecimiento de un protocolo de limpieza adaptado a las especiales características de los espacios que atraviesa la N-332 y que este debería incluir la limpieza de las charcas y saladares que bordean la vía.
En el transcurso de esa reunión de la Junta Rectora, los grupos ecologistas pidieron además que en cumplimiento de lo dispuesto en el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) de este espacio protegido, se procediera a la redacción del preceptivo estudio de minimización de impactos del trazado de la carretera N-332 que discurre por el interior del Parque Natural, documento que debería haberse redactado en el plazo de 6 meses desde la entrada en vigor del PRUG.
El pasado mes de octubre fue presentado un escrito con los aspectos que, a juicio de los ecologistas, debería incluir el mencionado plan de integración paisajística. Entre las medidas propuestas se encuentra la sustitución de las actuales biondas metálicas por otras forradas de madera, la adecuación de los puntos de parada existentes en la actualidad, la instalación de barreras físicas para evitar la entrada de vehículos a motor en el saladar del Tamarit o la reducción de la velocidad máxima permitida a 70 Km/h entre otras.
En ese escrito, las organizaciones alertaban también de que la problemática de residuos en el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola no solamente se limita a los generados por los usuarios de la N-332, sino que en los últimos meses, se ha detectado el abandono de residuos en la braza del azarbe Ancho, acumulándose grandes cantidades de envases y bolsas de plástico, presumiblemente abandonados por pescadores deportivos que cada vez acuden a pescar en mayor número a ese sector del Parque Natural.
Por otra parte los ecologistas solicitan que, independientemente de la redacción del mencionado estudio de integración paisajística, la Consellería de Transición Ecológica acuerde con la Delegación del Ministerio de Fomento en la Comunitat Valenciana la adopción de medidas concretas e inmediatas de limpieza del entorno de la N-332 a su paso por el Parque Natural de las Salinas de Santa Pola.