Hoyo Serrano. Foto: APALICANTE. Los colectivos ecologistas Amig@s de Sierra Escalona (ASE) y Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) han presentado alegaciones ante la Generalitat Valenciana contra el proyecto de instalación de una planta fotovoltaica junto al paraje Hoyo Serrano. Resaltan las consecuencias y daños en el plano de la biodiversidad y medioambiental que tendría esta instalación que ocuparía 57,6 ha.
Ubicado en suelo del municipio de Almoradí, esta planta se proyecta en el entorno limítrofe del espacio forestal de interés natural del Hoyo Serrano, el barranco de Calderón y la Caldera del Gigante, una alargada y rocosa poza con agua, un espacio natural muy conocido y visitado en la zona. El proyecto lo presentó el grupo promotor e inmobiliario TM, a través de su línea de negocio de energía renovables, abierta en 2019, TM Renovables La Juliana S. L. Así es como se llama la zona, La Juliana, donde la mercantil ha solicitado instalar la planta.
Las parcelas donde se proyecta están catalogadas como suelo no urbanizable y donde se instalarían 69.000 paneles y con las que se prevé generar un total de 31,74 MWp. Los colectivos conservacionistas señalan que la ocupación de casi 58 ha supondría una pérdida de biodiversidad y de calidad paisajística al romper lo que se conoce como mosaico agroforestal, es decir, la mezcla de zonas agrícolas y forestales en un mismo espacio.
Además, añaden desde ASE y AHSA, que para la instalación de esta planta será preciso el movimiento de tierras de unos 80.000 m3, entre desmontes y terraplenes. Esto, argumentan, incrementarían los riesgos de erosión y desertificación.
Además de la instalación de los paneles fotovoltaicos, la planta necesita un centro de transformación, una subestación y una línea de evacuación, 2.249 m de tramo aéreo sobre suelo forestal y 3.744 m subterráneo. Estas instalaciones implicarían dos problemas. Por un lado, que se encuentra a 500 m de nidos de buho real de la Sierra de Benejúzar. Destacan que este ave rapaz nocturna ya es una víctima habitual de colisiones y electrocuciones con tendidos eléctricos. El otro problema del que alertan es del riesgo de incendios.
Como alternativa “viable y sostenible” –según señalan los dos colectivos- a este emplazamiento, sugieren que los paneles solares se instalen en las cubiertas de las naves que conforman el polígono industrial Las Maromas de Almoradí, ubicado a 2,5 km. De este modo, esgrimen, se evitaría “ocupar suelos agrícolas de valor ambiental y paisajístico en el marco de la necesaria priorización que debe presidir la implantación de las energía renovables del territorio”.
En caso de salir adelante el proyecto se convertiría en la segunda de las cuatro plantas proyectadas en la Vega Baja con mayor superficie y energía generada. La mercantil Itel y Bibey, del fondo de inversión Atitlan tiene proyectada una planta fotovoltaica en término municipal de Orihuela, junto a Sierra Escalona de 300 ha –repartidas en dos plantas contiguas. De ambas se generarían 178 MWp. Le seguiría la de Almoradí, y después el proyecto que la empresa Circle Energy contempla en San Miguel de Salinas, y también en el entorno del paraje protegido de Sierra Escalona. En este caso la superficie requerida es de 6,85 ha y una potencia generada de 3,63 MWp. La última sería la de Catral y que ya está en funcionamiento, en una parcela de 4,13 ha y 1,8 MWp.
