Vistas de edificios en Dolores. Foto: APDOLORES. Con el fin de reducir el riesgo de inundación en caso de lluvias torrenciales, Dolores verá reforzado el azarbe de Mayayo con un nuevo murete. Unos trabajos para los que acaba de salir el pliego de condiciones técnicas y cuya obra se cifrará en unos 122.000 euros. La Diputación de Alicante aprobó en octubre de 2018 esta ayuda para el Sindicato General de Aguas de Dolores para subvencionar totalmente la labor. Son unas instalaciones para las que regantes demandaban, desde hace años, una mejora. Y es que, con ella y con otras obras paralelas en Abanilla, se quiere disminuir el riesgo de inundación en caso de gota fría, algo que ya pasó en 2017.
La función principal del azarbe de Mayayo es distribuir aguas de regadío, principalmente en Dolores, San Fulgencio y Elche. En Dolores, los interiores de los canales han sido revestidos para evitar la pérdida de agua por filtraciones y aumentar el rendimiento hidráulico. En el caso de lluvias intensas, el azarbe es la vía de evacuación del margen izquierdo del río Segura y también protegen a las zonas habitadas y cultivos de inundaciones. Tras la gota fría de 2017 aparecieron fisuras y grietas, que provocan filtraciones que afectan a las vías de comunicación próximas, como la vereda de Mayayo. También pone en peligro la seguridad de los usuarios, cultivos, bienes y personas de las parcelas colindantes, y fauna cercana al entorno.
El Consell reforzó los muros del canal en su último tramo, desde el puente con la carretera CV-858 hasta el punto de confluencia con el azarbe de Abanilla, mediante un murete de hormigón armado y el gunitado de las paredes verticales, pero quedó sin reparar el tramo existente desde el mencionado puente y la zona cubierta de canal en la avenida 8 de Marzo, en el casco urbano de Dolores.
En el tramo del azarbe de Mayayo, desde el puente de CV-858 hasta la cubierta del casco urbano se aumentará la sección de muros de mampostería enlucidos con un murete de hormigón armado de sección 30 x 50 centímetros. Los trabajos requieren de un camión con grúa, desde el camino colindante. Para facilitar la obra, se retirarán tramos de cañares y otros elementos que obstaculicen. Además se hará picado y demolición del enlucido superior de los muretes existentes, para dejar la piedra del muro limpia. Asimismo, se colocará un mallazo de refuerzo anclado sobre los muros y se proyectará un gunitado de cemento.
El proyecto de obra tiene una duración prevista de dos meses. Primero, se realizará el picado y la demolición del enlucido de los muros existentes y se retirarán. Después, será el turno de colocar la armadura de anclaje en la piedra del muro superior. Más tarde, se aplicarán resinas a la mampostería, ya limpia y se colocarán las armaduras. Como últimos pasos estarán el encofrado de a dos caras de los muretes y la colocación de impermeabilización en las juntas. A continuación llegaría el vertido de hormigón, con las operaciones de vibrado y nivelación y el desencofrado final. El plazo de garantía para estos trabajos será de doce meses a contar desde la recepción de las obras.
Los azarbes del área son canales artificiales construidos a cielo abierto que recogen aguas arriba en los términos municipales de Orihuela, Rafal y Almoradí. Estas construcciones, de mampostería con cemento, se disponen hilera sobre hilera. En el curso de estos canales, el interior no se reviste para facilitar el filtrado de las aguas sobrantes de los regadíos tradicionales, y se conduce aguas abajo para ser reutilizada en el riego por inundación.
