EL CAMPELLO. Bajo la premisa de que insultar a una persona es "extremadamente grave y hacerlo en presencia y con la anuencia de toda una corporación, con su alcalde a la cabeza, más aún", el primer teniente de alcalde y portavoz de Ciudadanos El Campello, Julio Oca, manifiesta su más profunda decepción por la actitud de todos los grupos políticos ante la moción de reprobación a Benjamí Soler, presentada en la última sesión plenaria.
“Asistimos a la legitimación y blanqueamiento del insulto, de lesionar la dignidad de las personas para poder continuar en la senda de las descalificaciones, dentro del debate político. Una forma de guardarse las espaldas ante previsibles salidas de tono de los intervinientes, antes que apostar por la corrección política ejemplificante”.
El mismo Juanjo Berenguer, alcalde y presidente local del PP, enfatizaba en un comunicado reciente que “no todo vale en política”, saliendo en defensa de los presuntamente “vilipendiados e insultados” en el desarrollo del pasado pleno ordinario. El mismo alcalde, cuyo grupo político votó en contra de reprobar al portavoz de Compromís por insultar a la edil de Ciudadanos Mercé Pairó. "Una vez más, la ley del embudo en su máxima expresión en manos de los populares", declaran desde Cs.
El mismo primer edil se erige en baluarte y defensor de los derechos y la honorabilidad de los técnicos municipales, quienes ya le han explicado, a través de un escrito, que no les utilice para sus objetivos políticos y responda a las peticiones que le realizan y que tienen bloqueado a este Ayuntamiento.
El mismo primer edil que parece tener una escala de honorabilidad entre los funcionarios; los “vilipendiados” y los que esperan en la puerta de un edificio público a que se les escuche para aportar datos relevantes para el correcto funcionamiento de este Consistorio, sin ser recibidos, ni escuchados; o los que esperan poder seguir trabajando porque no tienen suministro de material y no se les ofrece ninguna respuesta, en una situación inaudita en el municipio.
Romper lanzas en favor de la integridad y profesionalidad de los funcionarios “que trabajan con lealtad a la institución respetando la legalidad y asumiendo sus funciones”, incluye a todas las escalas. "Paradójicamente, coincidimos con Juanjo Berenguer en algo, en animarle a cambiar su discurso demagógico y actitud hacia los empleados públicos, totalmente impropia de todo un alcalde".
Trabajadores que obtienen como única respuesta “que lleva tiempo hablando con el secretario sobre este tema”. Mientras tanto, inestabilidad entre el personal, un municipio sin grúa, fuentes que se vacían por no tener cloro, un parking que no funciona por cajeros estropeados, ascensores paralizados y, en fin, el bloqueo de un Consistorio donde los operarios no puede trabajar por la parálisis de los contratos de ferretería y suministro de material de construcción, entre otros.
Desde Cs El Campello quieren dejar claro que la Concejalía de Contratación, que ostenta a través de la representación del edil Javier Giner y a través de la que muchos otros se empeñan en hablar en su nombre, “tratamos de desbloquear una situación que tiene paralizada al municipio desde una premisa clara, certera y acorde a ley”.
En este sentido, Javier Giner destaca el informe de la Junta Consultiva de Contratación Pública del Estado referido a la “Emisión de informes por el Secretario de la Corporación Municipal en los contratos menores”, que da contestación concluyendo: “La Disposición Adicional 3.8 de la LCSP exige el informe jurídico del Secretario de la entidad local antes de la aprobación de los expedientes de contratación también en el caso de los contratos menores”.
Y desde esta exigencia es desde la que se protege, defiende y da seguridad al personal en el ejercicio de sus funciones, no a través de notas de prensa demagógicas que, además de no decir nada, olvidan a una gran parte de la plantilla que sufre por la inacción de los máximos responsables de este Ayuntamiento.