ELCHE (EFE). El defensa del Elche Carlos Clerc afirmó este miércoles, en rueda de prensa, que en el vestuario del equipo ilicitano hay autocrítica pero también tranquilidad tras el mal comienzo del campeonato, con dos derrotas en las dos primeras jornadas.
“No es el comienzo que queríamos”, comentó el catalán, quien admitió que en los dos partidos el Elche ha mostrado dos caras muy diferentes en cada una de las partes.
“Debemos centrarnos en lo que nos ha podido perjudicar e insistir en las cosas buenas que hemos hecho. Hay que estar unidos y confiar en lo que hacemos”, explicó el jugador, quien relativizó al mal inicio tras recordar lo larga que es la competición.
“He jugado 150 partidos en Segunda y esto es un toque de atención, pero no nos puede mermar el ánimo y necesitamos creer en lo que hacemos”, argumentó.
“Esta categoría es larga y en la que el equipo más regular se lleva el gato al agua, por lo que hay que tener tranquilidad”, insistió el futbolista, para el que en Segunda hay 15 equipos que quieren ascender cada temporada.
“Para ser favorito hay que demostrarlo en el campo. Todos queremos volver cuanto antes a Primera, pero ser favorito te lo tienes que ganar y de momento no nos lo hemos ganado”, explicó Clerc.
El catalán dijo sentirse cómodo en su nuevo rol como central, alejado de la banda, y desveló que el técnico Sebastián Beccacece le quiere en esta nueva demarcación “por la versatilidad y para tener una salida de balón limpia”.
Clerc señaló que una de las claves para ganar al Villarreal B será imponer un fuerte ritmo de salida para demostrar al rival “que aquí es difícil sacar puntos”.
El defensa también se refirió a la situación de su compañero Lucas Boyé, en la órbita de varios clubes, al que no ve descentrado sino “contento y feliz”.
“Nos aporta una barbaridad. Todos deseamos que llegue el final del mercado. Sabemos que hasta el 31 de agosto puede pasar de todo”, señaló Clerc, quien reconoció tener ganas de llegar al 1 de septiembre “para saber los que somos y tirar hacia adelante”.
Por último, Carlos Clerc recordó, en el tercer aniversario del último ascenso del Elche a Primera, que aquel equipo, del que él aún no formaba parte, es un buen modelo para el actual por su capacidad de resistencia y solidez.
“No fue una temporada de rosas, sino muy dura. Si algo hay que destacar era su tenacidad y lo jodido que era de ganar. Igual no era el más vistoso ni el que hizo mejor temporada, pero ascendió por esa competitividad”, concluyó.