ELCHE. Estrategias de financiación para emprendedores y startups, valoración y quién es quién en el ecosistema de capital privado o experiencias aprendidas con la inversión privada. Son algunas de las claves y consejos de la jornada online del Parque Científico de la UMH, "Valoración de proyectos y captación de capital privado en start-ups". Un encuentro que sirvió para ofrecer, de la mano de expertos, claves y consejos que permitan a los emprendedores conocer cuál es la estrategia que sigue un inversor privado así como los aspectos que valora a la hora de apostar por un proyecto de negocio.
Los ponentes son: Ignacio Uzquiza, actualmente ejerce el cargo de técnico de asesoramiento empresarial y proyectos internacionales en CEEIM. Pedro García cuenta con más de 12 años de experiencia en el sector financiero. En la actualidad, es coordinador de Murcia-Ban y mentor de Wannaseed. Cosme Bernabé es licenciado en Económicas y socio de Wannaseed, del que actualmente también es miembro del comité de inversiones.
La jornada, moderada por María Pina, del Parque Científico de la UMH, comenzó con la ponencia de Ignacio Uzquiza, quien empezó dando cinco claves para tener en cuenta a la hora de buscar financiación para un nuevo proyecto.
La primera de ellas es la de designar a un equipo - a ser posible con funciones claras y multidisciplinar, en el que cada persona tenga unas habilidades y objetivos claros dentro del proyecto. También es importante que haya un líder claro en ese equipo.
La segunda de las claves es la de tener el foco principal claro: los clientes, que serán la mejor fuente de financiación. El proyecto ha de enfocarse en los clientes al menos desde que se disponga un producto mínimo viable. "Hay que satisfacer las necesidades del cliente y vender", mantiene Uzquiza.
En tercer lugar hay que tener una clara hoja e ruta financiera, "no levantar el dedo y pedir financiación sin base". Y es que, asegura el técnico de asesoramiento empresarial y proyectos internacionales en CEEIM, el ecosistema cada vez es más profesional y requiere de mayor seriedad en los planes de los emprendedores.
Entre algunas de las claves de la hoja de ruta pasa por, por ejemplo, marcar hitos en los siguientes seis o 18 meses y qué cantidad de dinero se necesitaría para conseguirlos. También aconseja "ser coherentes con los recursos disponibles y los que se pueden conseguir a corto o medio plazo", además de ir con la hoja de ruta financiera trabajada al banco o inversor.
En cuarto lugar aportó claves para el llamado time to tomb o runway. Esto es: saber cuál es la propia realidad y cuánto tiempo, dinero y sacrificios se está dispuesto a hacer. En este punto es clave preguntarse si es el momento adecuado para emprender, si se tiene el dinero o tiempo suficiente, y reflexionar si se podrá llegar al próximo objetivo o, si no se llega, si hay plan B o vuelta atrás.
Como quinta clave señaló como imprescindible el relacionarse con el ecosistema: conocer las alternativas de financiación a disposición, hablar y entablar relación con las partes, aprender, resolver dudas y aconsejar alternativas para sacar adelante los planes.
Para sacar un proyecto adelante, también es importante conocer el propio plan y preguntarse si el proyecto es realmente invertible, en qué fase se encuentra y si la idea es tecnológica o no.
Para conocer si el proyecto es invertible o no hay que diferenciar entre planes rentables o escalables. Ambas son buenas opciones para llevarlas adelante, pero solo los escalables tendrán la oportunidad de encontrar u inversor privado. ¿Por qué? Porque los proyectos rentables crecen de forma sostenida en el tiempo pero lineal y lenta. Los proyectos escalables, en cambio, como las startups, suelen tener un crecimiento exponencial en el que, a corto plazo se consiguen resultados positivos y los gastos son sostenidos, lineales y controlados. Este tipo de inversor quiere invertir dinero y que se use para desarrollar el producto, acciones comerciales y hacer crecer el valor de la compañía. El fin: salir de ella con rentabilidad.
¿En qué fase se está? Es clave conocer en qué momento de ciclo de proyecto se está. Según la respuesta, habrá que tocar una u otras puertas de financiación. En fase inicial es necesaria financiación de familiares o gente de confianza. Ya en fase semilla con el valle de la muerte cruzado, se puede recurrir a ayudas públicas, premios e incluso ya a business angels. Estos últimos también son los adecuados para empresas en un early stage, donde también cuentan Venture Capital, M&A y alianzas estratégicas. El last Stage sería la última fase hasta la salida a bolsa.
Una de las claves para el éxito, en estos momentos, es apostar por proyectos tecnológicos y buscar sujetos claves en el ecosistema para financiarse. Como ejemplos, Uzquiza puso a actores como Enisa, CDTI, los parques científicos, CEEIM, Ances o la plataforma de coinversión Cindes.
Por su parte, Pedro García ahondó en la figura del business angel, clave para buscar financiación en un early stage. Es un inversor particular, externo, de proximidad, que invierte parte de su patrimonio en startups, normalmente en fases iniciales. Suelen diversificar y coinvertir y, según los estándares, invierten un 5% de su capital total y lo diversifican.
Este tipo de inversor lo hace para acompañar al proyecto durante tres o cinco años para luego vender su parte a otros inversores o a venture capital. No son socios a perpetuidad, sino estratégicos y puntuales.
García destacó que, en los últimos 10 años crecen este tipo de inversores en la Comunitat Valenciana y en Murcia y que cada vez hay más startups que escalan hasta llegar a bolsa.