ALICANTE. El Ayuntamiento de Castalla, gobernado por Ciudadanos y el PSOE, no tiene previsto conceder licencia a la planta fotovoltaica impulsada por Cobra Concesiones, filial del grupo ACS que preside Florentino Pérez. Ni piensa dársela a esa ni a las otras nueve plantas proyectadas en el municipio, que en total ocuparía 900 hectáreas. ¿La razón? El consistorio modificó el Plan General de Ordenación Urbana en abril de 2021 con el propósito de modificar los usos de determinados espacios en los que estaba proyectada esta planta y otras más. Por eso entiende que las plantas no tienen cabida en los suelos elegidos.
Así lo ha expuesto el alcalde de Castalla, Antonio Bernabeu, de Cs, quien ha recordado los pasos iniciados por el ayuntamiento en abril de 2021, cuando se presentaron los primeros proyectos. Entonces, tanto Bernabeu como la concejala de Urbanismo, Maite Gimeno, anunciaron dos medidas: la primera, proteger el suelo de elevada protección agrícola y paisajística ante la autorización de instalaciones fotovoltaicas de grandes dimensiones; la segunda medida, iniciar una modificación del Plan General de Ordenación Urbana, tal y como prevé la ley urbanística valenciana, la Lotup. Con este cambio, los que pretendía Castalla es crear suelo destinado a tal fin y establecer las directrices a seguir para la instalación de este tipo de instalaciones; siguiendo para ello criterios de equilibrio, coherencia y armonía con el entorno paisajista y urbanístico, ha explicado el alcalde.
Bernabeu ha recordado que esa modificación puntual del PGOU incluía un informe técnico sobre las ubicaciones idóneas del término municipal en las que se podían instalar esas plantas. De manera, que a juicio del primer edil, con los cambios introducidos en el planeamiento no sería posible conceder el permiso a Cobra Concesiones ni al resto de proyectos, que, como ha recordado, ocuparían 900 hectáreas; tres veces que lo ocupa ahora el centro urbano y el polígono industrial.