ALICANTE. Al exfutbolista Carlos Aranda, investigado junto a otras cinco personas por el presunto amaño de partidos, el Hércules le costó dinero en su día.
Así se desprende del sumario de la bautizada como operación Oikos, en la que se investiga la existencia de una red dedicada al amaño de encuentros de Primera y Segunda División y al que ha tenido acceso Alicante Plaza. En una de las muchas escuchas policiales a los imputados recogidas en el mismo, concretamente una en la que Aranda es protagonista, este hace referencia a un encuentro del equipo blanquiazul, del que llega a decir a sus interlocutores que estaba "hecho", pero también que apostó en relación con el mismo y que las cosas no salieron como precisamente esperaba.
La conversación, registrada gracias a un micrófono con geolocalizador instalado por la Policía en el coche de Aranda (los agentes solicitaron autorización al instructor de la causa para sortear las medidas de seguridad que empleaban los investigados en sus comunicaciones (como el empleo de teléfonos encriptados), tiene lugar el pasado 18 de mayo mientras el exfutbolista se encuentra junto a su primo Carlos López 'El Buitre' y su amigo Iván Alonso 'El Barquilla'.
Según obra en el sumario, a las 22:39 se inicia una confiada charla entre los tres, en cuyo minuto 5:33 Aranda dice de manera literal: "Yo soy el Raúl ese y digo al de las apuestas de BET365, el que me ha hecho la apuesta que no era ni Andriu ni nada: tú vete a tomar por culo, te va a pagar un cipote y luego tú vas y te retiras ya de las putas apuestas tío... Es que tú sabes lo que pasa con eso... es lo que te estoy diciendo, si tú quieres que tú ganes un dinero, lo inviertes y lo generas, pues tú lo entiendes, pero es que es un dinero que te vas a ganar de viajes con tu familia... y cuando te metes el 'cuazo' (fonético), que te lo van a meter si es que las apuestas, esto ya se ha vuelto una cosa, que aunque esté hecho es capaz de fallarte. Es que a mí me ha pasado, es que estaba hecho un partido, te lo juro, se quedaba solo, veinte veces el del Hércules, veinte veces con el portero y no metía el gol y no marcó".
El exfutbolista malagueño no estaría haciendo otra cosa que compartir con sus amigos algo que le habría sucedido recientemente en relación con una apuesta perdida (y el quebranto económico que eso conllevó) y que no sería la primera vez que le pasaba; para ello, les pone como ejemplo ese supuesto partido del Hércules sobre el que no les ofrece más datos, pero que del resto de la conversación y el contexto en que se produce sí cabe inferir que se habría celebrado hace varias temporadas.
Archivado por partida doble
El Hércules se ha visto salpicado por el asunto de los amaños en varias ocasiones, la última en el verano de 2013 cuando el propio Javier Tebas, ya entonces presidente de la Liga de Fútbol Profesional, aseguró abiertamente que el encuentro de la última jornada de la Liga 2012/13 en Segunda División A entre el Racing de Santander y los blanquiazules, disputado el 8 de junio en El Sardinero y que finalizó con victoria cántabra por 3-0, estaba amañado.
Tebas apuntaba a un informe de la UEFA y de Betradar, pero la realidad es que tanto de la investigación administrativa como judicial que se abrieron a cuenta del mismo terminaron archivándose, tras no probarse la conducta antijurídica imputada.
En libertad con cargos
El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca, Ángel de Pedro, levantaba el pasado viernes el secreto de sumario de la pieza principal de la operación Oikos en la que además de Aranda están investigados por la presunta comisión, entre otros, de los delitos de corrupción entre particulares, estafa y pertenencia a banda criminal los futbolistas Íñigo López del Deportivo de la Coruña y Borja Fernández del Real Valladolid; Raúl Bravo, exjugador del Real Madrid; Agustín Lasaosa, expresidente del Huesca; y Juan Carlos Galindo, quien fuera jefe de los servicios médicos del club oscense.
Mientras que este último quedó en libertad con cargos tras declarar ante el instructor, Agustín Lasaosa y Borja Fernández tuvieron que depositar 50.000 euros en concepto de fianza para lograr la libertad condicional; Íñigo López hubo de consignar 75.000 y Carlos Aranda y Raúl Bravo, que llegaron a ingresar en prisión, 100.000 euros.