CALLOSA D'EN SARRIÀ. El Ayuntamiento de Callosa d'en Sarrià necesita tiempo. El pleno ha aprobado una moción de urgencia para pedir una prórroga a la Generalitat para el documento de alcance sobre la Modificación Puntual de su Plan General de Ordenación Urbana y Ordenación Pormenorizada de la zona Anibits Margequivir. Es decir, la macrourbanización de las faldas de la Sierra de Bèrnia.
La prórroga se ha sometido a la valoración del pleno después de que se formalizara el contrato con la empresa que adaptará el proyecto turístico residencial a las exigencias del Consell, tal y como avanzó este diario. Hay que tener en cuenta que la Generalitat emitió su documento de alcance del estudio ambiental y territorial estratégico en abril de 2017, donde el proyecto salió mal parado, con la eliminación del 75% del suelo por estar protegido.
La firma entre el Ayuntamiento y la mercantil para la consultoría técnica se produjo este jueves por la mañana, representando a las partes el alcalde de Callosa d’en Sarria, Josep Saval, i el arquitecto Wendelin Hinsch, a quien se ha adjudicado el estudio. El Ayuntamiento ha destinado en el presupuesto de este año 135.000 euros para este fin.
Según explicaron desde el Consell tras la Comisión de Evaluación Ambiental en aquel momento, Callosa aún tiene una gran superficie residencial por desarrollar "considerable" respecto a lo que plantean con el Plan Parcial mencionado. "Por lo tanto, si quisieran ampliar una determinada cuestión en un suelo agrícola o protegido, que no tiene calificación de urbanizable, tendrían que desclasificar el otro", explicaron en relación al 25% restante.
El 75% del suelo aproximadamente está protegido, entre otros, por Red Natura 2000. Un valor ecológico que se muestra al estar también incluido en el ámbito del Paisaje de Relevancia Regional y como Lugar de Interés Comunitario (LIC).
Tal y como indicaron en un comunicado desde el Ayuntamiento, para la Corporación Municipal el proyecto turístico residencial Aníbits-Margequivir es vital para el futuro desarrollo estratégico del pueblo ya que, por un lado, contribuirá a la diversificación de su economía que traerá consigo la creación de puestos de trabajo, tanto directos como indirectos, y abrirá la puerta a un nuevo mercado turístico. Por otro lado, la actuación urbanística mejorará el déficit en las comunicaciones de la localidad y conseguirá frenar el retroceso poblacional que en los últimos años ha sufrido Callosa.
"Los miembros de la Corporación local insisten en que el proyecto Aníbits-Margequivir es una actuación turística pionera, respetuosa con el medio ambiente e integrada en el paisaje y también en el patrimonio etnológico de Callosa d’en Sarrià que tendrá un beneficio incalculable para el futuro del municipio", concluyen en el escrito.
El proyecto tal y como está planteado en la actualidad, apuesta por eliminar la gran cantidad de chalets unifamiliares, para dar prioridad a edificios de gran altura, preveían dos campos de golf y un hotel de 80 plazas.