BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm pone en manos del Consell Jurídic Consultiu (CJC) el futuro más próximo del PAU 1-El Murtal. Tras iniciar el procedimiento para quitar la condición de agente urbanizador a la empresa actual, Prometosa Construcciones, el Consistorio a través de la Junta de Gobierno Local ha optado por remitir a la entidad autonómica el expediente con el fin de que resuelva con el conflicto suscitado después de que la empresa se haya opuesto a la propuesta de resolución planteada por el Ayuntamiento.
La administración local inició el procedimiento después de comprobar que, a su juicio, se le podían imputar a la mercantil una serie de incumplimientos. Prometosa presentó alegaciones a la propuesta, pero la Junta de Gobierno ha rechazado las mismas, también las de la entidad bancaria avalista. Sin embargo, sí que ha tenido en cuenta las planteadas por otras dos sociedades. Y en base a los diferentes informes municipales, han remitido el expediente al CJC para que dictamine cuál es la mejor forma de continuar.
Sobre este asunto se ha pronunciado la concejal de Urbanismo, Lourdes Caselles, quien ha recordado que el Ayuntamiento firmó con Prometosa el convenio urbanístico en 2006. Pero hace meses que se optó por resolver la condición de agente urbanizador después de que no atendiera a los requerimientos del Ayuntamiento para que presentara el proyecto de urbanización subsanado. De este modo, los informes técnicos municipales apuntan directamente a que la mercantil "no ha cumplido con las obligaciones firmadas en su día y que, en consecuencia, hay que resolver el convenio y retirarle la condición de agente urbanizador". Una posición que ha servido también para rechazar las alegaciones.
Sin embargo, como las partes no están de acuerdo, el Consistorio remitirá el expediente al Consultiu para que dictamine si procede o no la resolución del contrato. Por ello, este procedimiento de resolución queda suspendido hasta que el órgano consultivo se pronuncie. En el caso de que sea favorable, el Ayuntamiento procederá a la resolución de la condición de agente urbanizador, pero no de la programación. Así, se mantendría la tramitación hasta ahora, como es la aprobación del plan parcial y el proyecto de reparcelación, según ha informado Caselles. Precisamente, la popular destacó que la redacción e inscripción de este último corrió a cargo del Consistorio, lo que se consideró como un incumplimiento de Prometosa.
El PAU 1-El Murtal es una bolsa de suelo pendiente de ejecutar jugosa para los promotores inmobiliarios. Tiene previsto ordenar este suelo urbanizable que cuenta con una superficie de 931.815, 30 metros cuadrados. Está ubicada en la zona de Poniente y en los últimos años es conocida en la ciudad por albergar el evento festero de la Acampada. Al margen de ello, los propietarios siguen esperando a que se desarrolle urbanísticamente ya que hay proyectadas unas 2.942 viviendas y de momento, los que conservan este suelo solo han tenido gastos.
Lejos de hacerse una realidad, el Ayuntamiento y la empresa solo han conocido hasta ahora un largo proceso administrativo y judicial. Sin ir más lejos, la administración local tuvo que hacer frente este año al pago de 683.169 euros a Prometosa para cumplir con la sentencia, ya firme, que recoge la devolución de este importe correspondiente al anticipo de la carga económica en concepto de medida compensatoria derivada del convenio urbanístico.