BENIDORM. El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, anunció este miércoles que el gobierno local prepara junto con los técnicos municipales el borrador de presupuestos para 2019 con una inversión en la ciudad de 9 millones de euros que ha sido posible a la obtención de subvenciones, como así destacó Pérez. Una cifra superior a los años anteriores, alrededor de un millón más con respecto al 2018. El primer edil lo informó durante el tradicional desayuno con los medios de comunicación en días previos a la Navidad.
Eso sí, la inversión real es de cerca de 5,5 millones, según aclaró el primer edil, es decir, sin contar con las subvenciones supramunicipales que ya tienen concedidas. Hay que tener en cuenta que los proyectos más relevantes han obtenido ayudas, como es Red.es (más de 800.000 euros) o la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi). Esta última salió publicada su ratificación el pasado martes, y sería uno de los motivos por los cuales no han podido finalizar el borrador hasta ahora, junto con el coste de los accesos al polígono industrial. Dependiendo de estas dos cuestiones, ajustarán más o menos el borrador.
Otra de las grandes ayudas para Benidorm está cifrada en 710.000 euros, para la puesta en valor del Castell. Teniendo en cuenta el capítulo de inversiones, cifran la cantidad dedicada al presupuesto participativo. En esta ocasión, serán 450.000 euros para los proyectos que decidan desde el Consejo Vecinal.
El Ayuntamiento aportará 280.00 euros para avanzar en la musealización del yacimiento de El Tossal, un millón para ejecutar todas las actuaciones previstas en el Plan de Accesibilidad Universal, y la aportación municipal a la Fundación Visit Benidorm, que crece hasta los 600.000 euros, 50.000 más que en 2018.
Al margen de las inversiones, más cuantiosas justo en el año electoral, Pérez sacó pecho de la gestión de las cuentas, con una bajada de la deuda con los bancos altamente superior a la que venía marcada por el Plan de Ajuste y que se podría cancelar durante el 2019. El documento que preveía su final para diciembre de 2023, se podrá amortizar en torno a tres años antes, según adelantó el primer edil.
Además del repaso por los proyectos del futuro, el alcalde aprovechó para repasar los ya ejecutados o en marcha. Para ello, remarcó la remodelación de la Avenida del Mediterráneo, que en estos momentos está en construcción su primera fase. O las numerosas obras en pro de ganar en metros de zonas verdes y parques, como es el Parque de Foietes, construido durante su mandato y que estaba incluido dentro del Plan Confianza de la Generalitat de 2009. O por otro lado, el parque de la Séquia Mare aún en proceso, así como Els Ametlers, La Cala, Tamarindos y Xaloc.
De igual modo, señaló el “giro de 180º” que se ha dado a la Escena Urbana con actuaciones “en todos los barrios” que se han realizado “escuchando a vecinos, empresarios y colectivos sociales” y que han permitido “eliminar barreras, promover la accesibilidad, mejorar la seguridad vial y peatonal, y apostar por la sostenibilidad”. También se ha referido a la peatonalización y semipeatonalización de calles “para devolverlas al ciudadano, al comercio y a la restauración” como Tomás Ortuño, Gerona, Armada Española, Apolo XI y Sant Antoni.
A esto añadió las 4.750 nuevas plazas nuevas en la ciudad, con espacios como el de Foietes. Además se ha referido a la gestión urbanística, que ha permitido reformular e impulsar el desarrollo del mayor plan parcial pendiente de ejecutar, el Ensanche de Levante; y ha recordado que en breve empezará a ejecutarse el Plan Parcial Poniente 2/1 que posibilitará “conectar, por fin, la zona de Xixo con la primera línea de la playa de Poniente”. Un sector se va a desarrollar en paralelo con la Unidad de Actuación 1 de Poniente, que estará a disposición de la ciudadanía en un periodo no superior a cinco meses.
Y todo ello, aseguró el primer edil, “manteniendo, con algunos incrementos, el gasto social y el dedicado a servicios y actividades para la ciudadanía”.
