El alcalde, Luis Barcala, durante su encuentro telemático con la consellera de Sanidad.ALICANTE. El alcalde de Alicante, el popular Luis Barcala, ha mantenido este martes una reunión por videoconferencia con la consellera de Sanidad, Ana Barceló, y los primeros ediles de Valencia, Joan Ribó, y de Castellón, Amparo Marco, con el objetivo conocer de primera mano las circunstancias que han impedido a Alicante y las otras dos capitales valencianas pasar de la Fase 0 a la Fase 1 en el proceso de desescalada, según han indicado fuentes municipales a través de un comunicado.
Sin embargo, según las mismas fuentes, "lejos de esto, el encuentro no ha aportado claridad sobre este tema y ha quedado en el aire una pregunta directa de Barcala a la consellera sobre cuál es el plan para avanzar y si la solución es, como parece ahora, realizar test a las personas que presentan síntomas, pese a que el propio Ministerio de Sanidad especificaba en sus instrucciones del pasado 25 de marzo que era preciso realizar diagnóstico con PCR a todas las personas con síntomas".
A este respecto, el alcalde ha mencionado que, según los datos que la propia conselleria ha facilitado al ministerio a siete dias del inicio del desconfinamiento, en Castellón se practicaron test al 75% de las personas con síntomas, en Valencia a un 45% y en Alicante a un 31%. "La situación era mucho peor a 14 días de la fecha marcada por el Gobierno para iniciar la desescalada, porque en Castellón el porcentaje era del 55 de los sintómaticos, en Valencia del 40% y en Alicante del 30%. Es llamativo que esos porcentajes de test realizados a sintomáticos en el distrito sanitario de Alicante era aún menor", ha añadido Barcala.
De acuerdo con el mismo comunicado, Barceló ha señalado que "el ministerio le justificó que fue la preocupación por la movilidad de las personas en los territorios que no han pasado el corte la principal causa de la negativa a que Alicante, Valencia y Castellón avanzaran de fase", como ya ha informado Alicante Plaza. Y, según las mismas fuentes, los tres alcaldes "han coincidido en expresar sus dudas sobre esta circunstancia, dado que esa movilidad se produce por igual en otras poblaciones que sí han tenido el visto bueno de Sanidad para iniciar la desescalada".
En todo caso, según el comunicado, al no obtener una explicación sobre "qué causaba la preocupación de movilidad del Ministerio", el alcalde de Alicante se ha referido "a la necesidad de tener un plan encima de la mesa, algo que no ha sido respondido por Barceló, y ha preguntado directamente si se presentará un nuevo informe, si en él se incluirán un mayor número de pruebas diagnósticas". Además, según el comunicado, Barcala también ha cuestionado sobre "qué va a cambiar de aquí al viernes respecto al informe que fue rechazado por el Ministerio de Sanidad".
Según las mismas fuentes, "tampoco ha contestado Barceló a este último intento del primer edil de Alicante por conocer la situación en la que estamos y hacia donde nos dirigimos y lo único que ha conseguido de la consellera es que le remita a una reunión que Barceló mantendrá con sus técnicos para decidir sobre ese extremo y que difiera cualquier explicación sobre lo sucedido a una futura comparecencia en las Cortes Valencianas".
