El alcalde de Alicante, Luis Barcala, en imagen de archivo.ALICANTE. La suspensión de la regla del gasto anunciada por la Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, este lunes, también ha generado reacciones en el Ayuntamiento de Alicante a través de su propio alcalde. El popular Luis Barcala, que ha reiterado su oposición a la propuesta de cesión de los ahorros de los ayuntamientos al Gobierno desde que se planteó la propuesta, ha considerado que se trata de "un acuerdo anunciado" que resultaba el paso lógico previsible después de que el Congreso tumbase, el pasado jueves, la convalidación del decreto ley por el que se preveía regular esa transferencia de los remanentes municipales.
En esta línea, se ha mostrado partidario de que se sigan acordando las reivindicaciones planteadas por el conjunto de los ayuntamientos que se han rebelado frente a la obligación de acordar esas aportaciones para que se siga flexibilizando las condiciones de uso de esos fondos por parte de la administración local.
Es mas, ha defendido el acuerdo aprobado en julio por su equipo de Gobierno (compuesto por PP y Cs) para destinar 19 de los 47,8 millones a los que ascendía el remanente municipal para cancelar toda la deuda que arrastraba el ayuntamiento con los bancos. A su juicio, con esa decisión, "Alicante se encuentra más liberado todavía que otros ayuntamientos que aún mantienen deuda bancaria y que, por lo tanto, siguen sujetos al cumplimiento de la Ley de Estabilidad Presupuestaria aunque se haya suspendido la aplicación de la regla del gasto", ha enfatizado.
PP y Cs prevén retomar los contactos con los grupos de la oposición esta semana para concretar el alcance de la cuarta modificación de crédito
Barcala ha señalado que con la decisión de suspender esa limitación se ha demostrado que sí había alternativa a ese decreto ley y ha sostenido que ahora se debe dar solución al uso de los remanentes, "que debe ser libre". Además, ha apuntado que en lo sucesivo se debe dar solución al reparto y al importe de las ayudas a los ayuntamientos "que han de ser incondicionadas". "Creo que debemos felicitarnos y creo que algo de razón debíamos tener los ayuntamientos cuando acordamos ese plante y le dijimos al Gobierno que no", ha señalado.
Respecto a la cancelación de la deuda municipal con cerca de 19 de los 47,8 millones del remanente, el primer edil ha insistido en que, hasta ahora, "existían tres tipos de ayuntamientos: los que no tenían remanente, que se quedaban al margen de las ayudas; los que tenían remanente pero mantienen deudas, que quedan sujetos a la Ley de Estabilidad Presupuestaria; y aquellos ayuntamientos que, por no tener deuda, son los que tienen mayor grado de libertad para disponer de sus ahorros, y esa es la situación de Alicante".
"En esa situación nos hemos puesto nosotros a propósito para tener más margen y mayor libertad; ahora bien, no podemos soslayar que en ningún año antes, las decisiones sobre los remanentes y sobre el techo de gasto se haya pospuesto hasta septiembre", ha incidido. "Venimos diciendo desde hace meses que se debía dar una solución a esto y el tiempo ha jugado en contra de todos; me alegro de que se haya dado una solución y de que se resuelva la situación en la que estábamos muchos ayuntamientos", ha concluido.
Por lo pronto, fuentes del equipo de Gobierno han confirmado también este lunes que esta semana se reemprenderán las conversaciones con los grupos de la oposición para concretar el alcance de la cuarta modificación de crédito del presupuesto de 2020 para aportar fondos a parte de las medidas comprometidas en el seno de la comisión para la reconstrucción de la ciudad tras el impacto de la crisis del coronavirus.
A priori, se da prácticamente por seguro que el importe de ese nuevo ajuste contable superará los 5 millones de euros, ya que esa es la cifra que se venía manejando hasta ahora para dar cobertura a ayudas sociales de emergencia, así como para lanzar una nueva convocatoria de subvenciones a pymes y autónomos.
