ALICANTE. En plena avalancha de autorizaciones y denegaciones ambientales por la Generalitat a plantas fotovoltaicas proyectadas en la provincia de Alicante (el calendario obligaba), el Ministerio de Transición Ecológica también sigue evacuando los grandes proyectos que dependen del Gobierno central, a partir de 50 MW de potencia. Así, el pasado viernes Transición Ecológica comunicaba a Atitlan Helios, la división de renovables del fondo de inversión valenciano, y a la firma eldense Awergy, el visto bueno a su proyecto de central solar de 116 MW de potencia en Monóvar.
Este proyecto, al igual que la planta fotovoltaica de 89 MW de potencia que la misma firma proyecta en Villena, ha sido promovido por Atitlan en 'joint venture' con la firma eldense de energías renovables Awergy (la antigua Ampertec) y la gestora Aurea Capital Partners: Atitlan posee el 50% de la sociedad y las otras dos 'patas' se reparten el resto a partes iguales. Hasta ahora, dos de los proyectos planteados por esta alianza, todos ellos de gran envergadura, han logrado el beneplácito ambiental del Gobierno, en forma de DIA: son 91 millones de euros de inversión y 205 MW de potencia los que siguen tramitándose en el Vinalopó.
La 'luz verde' de Transición Ecológica no se ha concedido a la ligera. Se trata de dos proyectos que, pese a un tamaño y potencia que podrían generar rechazo social (máxime en un contexto de eclosión del sector que ha atraído a los grandes fondos nacionales e internacionales), se han trabajado mucho desde el punto de vista ambiental y en permanente contacto con todas las administraciones implicadas y con la ciudadanía. La planta de Monóvar, de hecho, se ha sometido a dos exposiciones públicas, tras modificar el proyecto inicial para alejarse de la sierra de Salinas y soterrar gran parte del tendido.
Con la DIA, la 'joint venture' de Atitlan y Awergy quema las últimas etapas para poder comenzar las obras de esta planta, cuyos paneles irán directamente hincados al suelo (minimizando tanto el uso de hormigón como el movimiento de tierras), lo que permitirá la colonización del suelo por flora silvestre. Un sistema idéntico al de la planta de 89 MW en Villena, que logró la DIA del Ministerio el pasado mes de julio, y donde además se ha reducido al mínimo la distancia entre las placas solares y la subestación donde se volcará la energía, en Sax, de manera que el impacto del tendido será aún menor. Esta instalación debería poder comenzar sus obras en 2023, según el calendario que maneja la empresa.
La alianza Atitlan-Awergy-Aurea tiene previsto invertir más de 53 millones de euros en la construcción de su central fotovoltaica de Monóvar, y otros 38 millones en el parque solar de Villena, de manera que la inversión conjunta en estos dos primeros proyectos en el interior de Alicante suma los citados 91 millones de euros.
La planta 'Monòver' generará anualmente 230 GWh, el consumo anual de 70.000 hogares, y evitará la emisión de 88.000 toneladas de CO2 (300.000 árboles). 'Argos', por su parte, generará 185 GWh (el equivalente al consumo energético anual medio de más de 45.000 hogares españoles) y evitará la emisión a la atmósfera de 65.000 toneladas de CO2. La primera planta generará 500 empleos en su fase de construcción, y la segunda unos 400, según la empresa. En total, abastecimiento para 115.000 hogares, casi 155.000 toneladas de CO2 evitadas, y 900 empleos en su construcción.