ALICANTE. La gastronomía forma parte de la cultura de cualquier sociedad. La mediterránea ha sido más que reconocida a lo largo de los años por su variedad, ingredientes frescos y naturales y la salubridad que aporta esta cocina. Como el mar Mediterráneo baña Alicante, esta experiencia para el paladar se vuelve extensiva. Y como ejemplo, un botón; o, en este caso, un título: Alicante acaba de ser elegida capital de la gastronomía de España durante el año 2025.
En la ciudad vigilada por el Castillo de Santa Bárbara existen varias zonas para comer de tapas. Quizás la calle más conocida donde encontrar estos platos es San Francisco, popularmente conocida como la calle de las Setas. Así lo confirma la cantidad de turistas que visitan la ciudad y escogen esta vía peatonal del centro por su oferta gastronómica y también por su atractivo fotográfico, al estar adornada por las míticas figuras con aspecto de hongo.
Los 340 metros de esta calle conectan otra zona óptima para tapear: el Portal de Elche. La plaza anexa recuperó en febrero su quiosco, reactivando el funcionamiento para completar las posibilidades hosteleras del entorno. Y, hablando de plazas, otra que también presenta una pincelada de tapeo es la Gabriel Miró que, además, divisa al mar y lleva directamente hacia otro punto gastronómico de Alicante.