VALÈNCIA. Frente a la ocultación y tergiversación de la verdad como posicionamiento político de un Consell atrapado en sus mentiras y su deseo de hacer a la ciudadanía valenciana cómplice de éstas, el destino nos ha traído una jueza que con sabia contundencia destapa en una frase los intentos de evasión de la responsabilidad del gobierno valenciano. Se trata de la jueza de instrucción de Catarroja responsable de investigar qué sucedió aquel fatídico 29 de octubre en el que nadie del Consell fue capaz de enviar una sencilla alerta a tiempo que, según ella misma afirma, habría salvado vidas.

Una investigación indispensable ya que la opacidad del Consell es palmaria, hasta el punto de que cuando esta humilde diputada pide información en ejercicio de la labor parlamentaria sobre quiénes estaban ese día en el CECOPI no obtiene ninguna respuesta.

Es bastante evidente que el Consell no quiere dar ninguna información, así como que está retrasando la constitución de la Comisión de investigación parlamentaria pensando sobre todo en cómo convertirla en un aquelarre contra el gobierno central. Todo ello con el apoyo de su socio VOX, cuyo nulo interés por esclarecer los hechos es notorio. 

Con 227 personas fallecidas y una zona 0 arrasada, tenemos un Consell incapaz de ofrecer soluciones tan sencillas como transporte suficiente que sustituya al tren y a la falta de coches, una tarjeta transporte que no requiera horas de cola en la calle para ser adquirida, ascensores que funcionen en las fincas que cuentan con personas mayores o con diversidad funcional, que las ayudas de primera necesidad lleguen, que las empresas cuenten con apoyo económico para reabrir,… Mientras tanto el señor Mazón se va a Madrid a desayunar y a ver si consigue colar alguna mentira y autoproclamarse “daño colateral”, en su desesperado intento de salvarse a sí mismo por encima de todo. Quizás creyó que en la comunidad autónoma donde Miguel Ángel Rodríguez, consejero áulico de la reina de la mentira y la sobreactuación (la señora Isabel Díaz Ayuso) juega con los medios y la tergiversación permanente de la verdad, era un buen lugar para sus intenciones. Pero ni Madrid ni su ecosistema mediático le pueden salvar de sí mismo.

En otro orden de cosas, ha llegado a nuestra Comunitat la propuesta de condonación de deuda para todas las comunidades autónomas en modo de despedida de la ministra Montero, antes de volcarse en la batalla política andaluza. Curiosamente es Andalucía la más beneficiada con el sistema ideado unilateralmente por el gobierno central, otorgándole prácticamente el doble que a nuestra Comunitat en términos de porcentaje.

Es obvio que cualquier condonación de deuda es beneficiosa, y, por tanto, bienvenida. Pero el enrevesado modelo de cálculo lleva a un curioso resultado: si bien somos la tercera Comunitat Autónoma a la que más cantidad se nos va a perdonar, el porcentaje es el menor del de todas las demás ¿vaso medio lleno o medio vacío?

Desde Compromís estamos más que hartos de quedarnos solos en la reivindicación del cambio de modelo de financiación y de lograr compensaciones a ese modelo caducado sólo tras duras negociaciones en los Presupuestos Generales. En suma, estamos más que hartos de ver como PP, VOX y PSPV cada vez que se vota a instancia nuestra se olvidan de los intereses de esta Comunidad cuando lo manda su partido estatal, y así beneficiar a otras Comunidades Autónomas bajo un cálculo político injusto.

 Así, cuando presentamos en Corts una ley de financiación para su tramitación estatal, la Ley de Tracte Just, entre PP y VOX  la vaciaron de sentido y contenido hasta dejarla en un mero y ridículo artículo, que solo conduce a evidenciar en el Congreso la debilidad de la supuesta unión en la reivindicación, pues unos y otros están más pendientes de lo que marcan sus líderes estatales que de solventar la injusticia que padecemos.

Eso sí, cada uno creará una verdad tras su tergiversación, lo repetirán hasta el aburrimiento y saldrán a exponerla con rostro convencido. Tal y como están intentando con las responsabilidades de la gestión de la DANA. Pero ahí hay un factor que se les está volviendo en contra: la jueza de Catarroja, que sigue buscando la verdad sin más sobre quién estuvo en el CECOPI, quién mandó el SMS de alerta, quién lo redactó, si se esperó a Mazón para tomar esa decisión y si fue él quien tomó el mando a su llegada más allá de las 19:43h (hora de la última llamada con la consellera Pradas), como nos hizo ver claramente en sus comparecencias en Àpunt. Y todo ello el único día de todo el año con alerta roja, con varios avisos de riesgo de graves daños en barrancos y con un 112 de competencia autonómica colapsado desde la mañana a raíz de las inundaciones y los desaparecidos. Mientras, el President se fue de comida al Ventorro y no sabemos aún dónde estaba después ni con quién hasta casi las 20h. Porque esa parte de su tarde debe ser tan inconfesable que aún no la ha hecho pública.

El pueblo valenciano merece saber la verdad, es decir, los hechos tal y cual se produjeron. Sin mentiras ni victimismos. Sin tergiversar la verdad. Pero ni Mazón ni Camarero ni Mompó la dirán nunca ¿hablarán el resto de los miembros del CECOPI?