BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm ha lanzado un nuevo proyecto, la creación de un área de conciertos en los campos Hermanos Martínez Munuera, ubicados dentro de la Ciudad Deportiva Guillermo Amor. La intención es ceder estas instalaciones para que una empresa organice conciertos durante el verano de 2026, 2027, 2028 y 2029. Una propuesta que hace surgir la duda de cómo continuará la operativa para organizar un año más el Low Festival, que pasaría por un acuerdo entre la parte privada y la administración local.
La nueva edición de 2026 fue anunciada por la empresa en cuanto terminó el evento este año: se celebrará el 31 de julio y el 1 y 2 de agosto. Parece no haber dudas sobre esta confirmación, por lo que solo queda saber cómo tendrán que operar. Lo cierto es que de momento, tanto el Consistorio como fuentes de la organización reconocen que para el próximo año todavía no hay un convenio firmado puesto que el anterior terminaba con la última edición celebrada en la que cumplían 15 años.
Asimismo, el pliego de prescripciones técnicas tampoco recoge ninguna excepción de fechas que dejaría libre para el Low el fin de semana anunciado.
De este modo, se abren varias posibilidades. De no prosperar el nuevo proyecto para el área de conciertos, ambas partes podrían firmar un convenio como han venido haciendo hasta ahora. Pero si el Ayuntamiento consigue sacarlo adelante, los promotores del Low Festival tendrían que sentarse a negociar con la administración local y el adjudicatario, según explicó a este diario el concejal de Eventos, Jesús Carrobles. El edil además apuntó que el Consistorio tiene la potestad de autorizar o no los conciertos propuestos.
Todo ello sabiendo que existe la posibilidad de que la propia promotora del Low Festival puje por hacerse con el contrato que acaba de sacar a licitación Benidorm. Hay que tener en cuenta que la organizadora del evento, Producciones Baltimore, optó este año por la concesión de los conciertos al aire libre en Muelle 12 de Alicante.
El área de conciertos se concentra en una parte en la que el Low monta cada año uno de sus escenarios. Pero con esta nueva propuesta se prevé que esta instalación sea fija. Es más, el edil señaló que uno de los avances que traería es que el montaje y desmontaje desaparece para cada evento, y por tanto, se gana tiempo para poder organizar conciertos más seguidos, ya que, por ejemplo, con este festival se terminaban bloqueando también la semana anterior y posterior a su celebración por estas circunstancias.